Juan Carlos I reconoce a su círculo más cercano que le hubiese encantado acudir a los premios Princesa de Asturias para ver a Leonor. La princesa lleva presidiendo esta gala un total de siete años, en ninguno de ellos el emérito ha podido estar presente porque ya se había decidido alejarlo de las chicas por sus constantes polémicas que solo perjudicaban a la corona. Se ha perdido muchos eventos importantes y es algo que le molesta.

Esta semana es muy importante para la familia real. Leonor preside como todos los años los premios Princesa de Asturias. La intención era que por primera vez lo hiciese en solitario, pero una vez más lo hará acompañada porque todavía la ven “demasiado verde”. No ha tenido tiempo de prepararse a conciencia con la formación militar. Felipe VI, Letizia y la infanta Sofía harán de acompañamiento. No tendrán ninguna participación especial, simplemente harán acto de presencia.
Juan Carlos I se ha vuelto una persona muy desafiante. En los últimos meses se ha puesto en el foco mediático al demandar a Miguel Ángel Revilla por vulnerar su honor y escribir un libro con sus memorias que como dato se publicará este 5 de noviembre en Francia y quiere estar presente en la presentación.
Juan Carlos desafía de nuevo a Felipe VI
El emérito no atiende a razones. Está cansado de vivir en Abu Dabi completamente solo y con casi 88 años. Le gustaría poder instalarse de nuevo en Madrid y pasar los últimos años de vida con los suyos. De momento ya ha conseguido que Felipe VI le deje pasar tiempo en Portugal. Ha alquilado una mansión en la zona de Cascais, Lisboa, donde ha estado todo el verano, acompañado en gran parte por la infanta Elena y Marta Gayà.
Para eclipsar a Leonor y fastidiar a Felipe VI y Letizia, Juan Carlos I se ha atrevido a programar una fiesta en Cascais donde ha invitado a grandes amigos y también a la infanta Elena, Cristina y algunos de sus nietos. Será una celebración que tendrá lugar a una hora en avión de Madrid, mucho más cómodo por desplazamientos, y todo el día habrá fiesta, aunque el momento clave será por la noche. De esta forma intenta eclipsar los premios Princesa de Asturias y también la visita posterior al pueblo del año.
