Juan Carlos I está poniendo todos los puntos sobre las íes en los últimos meses. El emérito está muy cansado de que se le humille de esta manera. Cree que es totalmente innecesario. Hace cinco años aceptó mudarse a Abu Dabi, lugar que decidió él mismo, pero quedó claro que era en el exilio. Su propio hijo le echó de España por las polémicas que rodaban alrededor de él. No podían permitirse que siguiese viviendo en Zarzuela y mucho menos que tuviese contacto directo con Leonor y Sofía. Han pasado cinco años de su marcha y sus visitas son cada vez más frecuentes, siempre discretas, pero querría quedarse para siempre. Es algo por lo que ha discutido en numerosas ocasiones con el hermano de Cristina y Elena. Por ahora no puede permitírselo. Le ha dado la opción de vivir más cerca, pero jamás en Madrid, y mucho menos en palacio.

Juan Carlos y Elena de regata
Juan Carlos y Elena de regata

El emérito ha conseguido chantajear a Felipe VI demostrándole que aún tiene mucho poder y es capaz de arruinar la corona si se lo propone. No quiere que su reinado y su figura quede en el olvido, por este motivo decidió conceder varias entrevistas personales a Laurence Debray, una periodista francesa que se ha encargado de escribir sus memorias bajo el título “Reconciliación”. El exmonarca quiere pedir perdón a todos los españoles y hacer un repaso desde su infancia hasta el fin de su reinado. Quiere dejar constancia de la importancia de su figura para España ahora que parece que muchos españoles ya le han olvidado, especialmente los más jóvenes.

Juan Carlos I quiere acabar con Pedro Sánchez, uno de sus enemigos 

Juan Carlos I siempre ha echado la culpa a Letizia de sus males porque cree que su hijo nunca le hubiese expulsado de España. Pero también a otra persona que está en su contra. Se trata de Pedro Sánchez. Culpa al presidente del Gobierno, que ya estaba en el poder cuando le expulsaron, de sus males porque el PSOE siempre ha ido en contra de la monarquía, según él. Al emérito no le ha importado pronunciarse acerca de su postura con el PP, el grupo político más afín a él. Ya no forma parte de la corona y no tiene ningún problema en decirlo.

Ahora el marido de la reina Sofía está muy contento porque Felipe VI se ha visto en la obligación de expulsar a Begoña Gómez de los actos institucionales por su imputación judicial por varios delitos. Pedro Sánchez también intenta desaparecer pronto para no tener que atender a los medios de comunicación.

Juan Carlos I y Pedro Sánchez
Juan Carlos I y Pedro Sánchez