Juan Carlos I y Felipe VI habrían tensado la relación en los últimos meses. El emérito estaría cansado de vivir en el exilio en los Emiratos Árabes. Se sintió un rey humillado y ahora ha visto que ni tan siquiera los españoles se acuerdan de él. Sabe que ha cometido muchos errores pero no le parece justo ese trato. Él ha hecho mucho por España y quiere un reconocimiento. Cree que cinco años lejos de su país ya han sido suficiente condena. Se hace mayor y sabe que su final está cada vez más cerca porque por ahora hay algo que todavía no puede comprar con su multimillonario patrimonio, la muerte. No quiere irse por la puerta de atrás. Por ello, en los últimos años ha concedido su testimonio a una gran amiga. La periodista francesa Laurence Debray.
Las memorias de Juan Carlos I llevan por título “Reconciliación”. Se trata de un repasado a su trayectoria como monarca pero también a su vida personal. Viajará desde su infancia hasta los 40 años de reinado, sin olvidar sus episodios más polémicos. Reconociendo sus errores pero también dando su versión de los hechos.
Juan Carlos I sabe como volver a Madrid gracias a su libro de memorias
Felipe VI ha intentado que ese libro nunca salga a la luz pero parece que Juan Carlos I no está dispuesto a ceder. Finalmente tras ser cancelada su publicación en enero y en junio, verá la luz en noviembre. En tan solo unas semanas se publicará y hay programado un acto en Madrid para su presentación al que acudirá su autora, pero también se ha ofrecido la posibilidad al marido de la reina Sofía, que no descarta aparecer, aunque sabe que hay algunas barreras.
El monarca no quiere a su padre en Madrid, y mucho menos para una presentación de su libro que levantará una gran polémica. Sabe que su presencia generaría mucha expectación y congregaría medios de comunicación de todo el mundo. Juan Carlos I aprovecha para chantajear a su hijo ahora que tiene el control de la situación. Si él quiere es capaz de no asistir a la presentación aunque las memorias se publicarán. Pero le pide abandonar definitivamente Abu Dabi y no vivir en Lisboa cuando tiene que venir a España. Él quiere una casa de alquiler en Sanxenxo, donde su amigo Pedro Campos, y otra en la lujosa urbanización La Florida, a unos 4 kilómetros de Zarzuela, cuando tenga un compromiso privado en Madrid. Es una situación muy complicada para Felipe VI.
