Juan Carlos I tiene mucho miedo. El exmonarca sabe que está muy mayor y empieza a tener serios problemas de movilidad. Es consciente de que su final está cada vez más cerca y no quiere irse por la puerta de atrás, como ha acabado su reinado. Al padre de Felipe VI le gustaría tener un funeral de Estado, aunque como ya no forma parte de la corona sería inviable. Empezó a tener más miedo por la muerte cuando falleció la reina Isabel II, íntima amiga del marido de la reina Sofía. Los Borbón siempre han tenido una excelente relación con la corona británica. De hecho, Juan Carlos I viaja a menudo a Londres para reunirse con Carlos III. Se ha preocupado mucho por su enfermedad.
La casa real británica también ha vivido unos años complicados. Con la muerte de la reina Isabel II llegó la comunicación del cáncer que padecía Kate Middleton. Pocas semanas más tarde se confirmó que Carlos III también padecía cáncer. Los dos se retiraron de la vida pública, se centraron en su recuperación.
Juan Carlos I sabe que a su amigo no le queda mucho tiempo de vida, la enfermedad empeora
Mientras la mujer del príncipe Guillermo evoluciona favorablemente y ella misma contó que estaba mejor y el tratamiento había resultado exitoso, con Carlos III hay un gran hermetismo y una máxima preocupación que se nota en las caras de todos cuando les preguntan por él. Juan Carlos I está informado de todo por el propio monarca británico, ya sabe hace dos meses que los médicos no le dan una gran esperanza de vida.
Hace unos días el príncipe Harry, retirado de la corona, habló para la BBC. Mostró su intención de reconciliarse con su familia ante el temor de la muerte de su padre. "No tiene sentido seguir peleando. La vida es preciosa. No sé cuánto tiempo le queda a mi padre", dijo Harry en la entrevista, que añadió sobre su progenitor: "No me habla por este asunto de la seguridad. Pero estaría bien reconciliarnos”.
"La reconciliación no puede llegar sin la verdad", dijo. "Pues ahora he descubierto la verdad. Sería bueno tener esa parte de la reconciliación ahora", continuó. "Si no la quieren, es su decisión", dijo.
Con estas palabras el príncipe Harry deja claro que su padre no evoluciona favorablemente, aunque Casa Real no ha querido hacer ningún tipo de comunicado. Está todo preparado por si algo malo pasase. El próximo rey de Reino Unido sería el príncipe Guillermo.
La muerte de Carlos III sería un gran golpe para Juan Carlos I porque es un gran amigo, mucho más joven que él y sabe que en pocos años podrían reunirse otra vez. El emérito tiene miedo a la muerte. Ahí es cuando se da cuenta que no era invencible.
