Como a todos los españoles, el pasado sábado las infantas Elena y Cristina vieron el vídeo de Letizia abrazándose de forma emotiva con Leonor en Panamá. La reina quiso ir a visitarla tras cuatro meses sin ver a su hija. Como muchos padres estuvo presente en la cena de gala que se organizó en la cubierta del buque escuela Juan Sebastián Elcano. Las hermanas de Felipe VI vieron la oportunidad perfecta para ir a Zarzuela sin su permiso.
Hace unos meses que Cristina, Elena y Felipe VI aparcaron sus diferencias para hablar sobre un tema que les atañe a los tres. Sus padres cada vez están más mayores y empiezan a tener algunos problemas de salud fruto de la avanzada edad. Además, en el caso de la reina Sofía ha recibido varios golpes en estos últimos dos años. La muerte de su hermano Constantino de Grecia a causa de un derrame cerebral y la enfermedad de su hermana Irene, unos meses más tarde se confirmó que padecía Alzheimer, la enfermedad del olvido. Aunque se han puesto todas las medidas para intentar ralentizarla, ha avanzado demasiado rápido. Prácticamente ya no se acuerda de nada ni de nadie. Esta Semana Santa ya no ha reaparecido. En las últimas apariciones se la vio con el rostro desmejorado, la mirada perdida y en silla de ruedas.
Felipe VI, Cristina y Elena pasan el día de la madre con la reina Sofía
Desde entonces la reina Sofía está muy triste. Su rostro lo dice todo. Elena, Cristina y Felipe VI han firmado un pacto verbal para ocuparse de la emérita. No quieren dejarla sola y buscan planes para que esté entretenida y piensa en otras cosas.
Letizia no volverá a Zarzuela hasta el miércoles 7 de mayo, momento en que Leonor zarpará de nuevo camino a Colombia. Así que Elena, Cristina y Felipe VI han tenido la oportunidad de celebrar el día de la madre con la reina Sofía, algo que no pasaba desde hace muchos años. La emérita no ha podido estar más contenta. Se ha organizado un almuerzo especial en palacio, y no solo ha contado con la visita de sus tres hijos, también de algunos de sus nietos como Victoria Federica.
Ha sido un día muy importante para los Borbón, por fin han podido celebrar un día familiar sin Letizia. La reina Sofía rompió a llorar por ver a sus tres hijos alrededor de la mesa y compartir un plan especial con ellos. Se siente muy orgullosa y feliz y ha podido olvidarse del estado de salud de Irene de Grecia. Los enfermeros se ocupan de ella las 24 horas del día.
