Aunque pertenezca a la familia Borbón, la vida de Cristina ha estado marcada por las dificultades. Ni haber sido hija de un rey, ni ser hermana del actual monarca, ni disponer de unos ingresos de 400.000 euros al año la han librado de los problemas. Juan Carlos le advirtió en su momento que estaba eligiendo al marido equivocado, aunque paradójicamente él y Iñaki Urdangarin mantenían una relación excelente, hasta el punto de asociarse en negocios. El desenlace fue que solo uno terminó en prisión.

Irene Urdangarin y la infanta Cristina / Gtres
Irene Urdangarin y la infanta Cristina / Gtres

La infanta tuvo que enfrentarse al rechazo social, a la pérdida de prestigio y a la dura tarea de sacar adelante a cuatro hijos prácticamente sola, y además en el extranjero. Los conflictos matrimoniales aparecieron pronto, coincidiendo con la etapa en la que sus hijos comenzaron a independizarse y a dejarla sola en Ginebra. Juan, Pablo y Miguel se marcharon en cuanto alcanzaron la mayoría de edad. Únicamente Irene permaneció con ella, por ser todavía menor.

Cristina había depositado grandes esperanzas en su hija pequeña, que planeaba estudiar en la universidad de Lausana una carrera de Administración y Dirección Hotelera. Sin embargo, al no superar las pruebas de acceso, aquel plan se vino abajo y el futuro de Irene dio un giro inesperado de 180 grados.

Después de pasar un año en Madrid, donde conoció a Juan Urquijo, con quien ya habría roto su relación, Irene Urdangarin emprendió su camino a Londres, donde estudia Organización de eventos en la universidad de Oxford. Viviría con su hermano Juan Urdangarin. La infanta Cristina quería quedarse cuatro años como mínimo más en Ginebra, pero sus planes cambiaron. Ella quería tener controlada a su hija, pero se le ha escapado de las manos. Siempre ha querido tener a sus hijos alejados del foco mediático.

Cambio de aires de Irene Urdangarin en Londres, nuevas compañías sin Juan Urquijo 

Según las últimas informaciones, Irene Urdangarin habría roto su relación con Juan Urquijo por la distancia y una supuesta infidelidad de ella a él. Tal y como se cuenta internamente, la joven habría conocido a un chico de su clase muy atractivo, con ojos azules, rubio y con cuerpo de gimnasio. Los dos han tenido varios encuentros íntimos. Y es que desde que vive alejada de su madre, Irene está desatada y Cristina tiene mucho miedo.

Ha salido de fiesta con sus amigos y ha bebido hasta perder el control y tener dificultades para llegar a casa. Algo muy común entre los jóvenes de esa edad que se creen demasiado mayores por cumplir la mayoría de edad.

Irene Urdangarin ha comunicado este verano a su madre que querría abandonar los estudios, algo que no le hace mucha gracia porque quiere que se labre un futuro y que no de ningún problema.

La infanta no estaba muy contenta con su grupo de amigos en Ginebra, algunos fumaban, salían de fiesta hasta altas horas de la madrugada y consumían sustancias estupefacientes. No quería eso para su hija, así que hizo todo lo posible para apartarla, y por eso no quiere que vaya con las amistades de Victoria Federica, no quiere que pase otra vez por lo mismo y en esta ocasión no vaya bien.

Irene Urdangarin en un funeral / Europa Press
Irene Urdangarin en un funeral / Europa Press