Felipe VI y Letizia no han tenido ni un respiro. Tras dos semanas de actos oficiales en España, arrancaron su primer viaje de Estado del curso y han puesto rumbo a Egipto, un destino estratégico para reforzar relaciones históricas. La agenda es tan intensa que apenas les queda tiempo para descansar. Hoy, en su tercer día, la reina se ha quedado sola por la mañana para visitar la Fundación Sultán, en pleno corazón de la llamada Ciudad de los Muertos. Por la mañana recorrió las zonas más sorprendentes y extremas del país.

Felipe y Letizia en Egipto
Felipe y Letizia en Egipto

La Ciudad de los Muertos es mucho más que un cementerio. Allí descansan desde personas anónimas en sepulturas humildes hasta grandes líderes en majestuosos mausoleos. El contraste es brutal: más de un millón de personas viven entre tumbas y panteones, en un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además, en esta misma zona se levantan joyas como la Mezquita de Ibn Tulun o la Ciudadela de Saladino, símbolos de la historia islámica.

El día anterior ya dejó imágenes de postal. Felipe y Letizia disfrutaron del atardecer frente a las pirámides de Guiza. No lo hicieron como turistas cualquiera, sino acompañados del presidente egipcio y su esposa, desde una terraza de lujo: la del hotel Mena House, con cena incluida y vistas únicas a las maravillas del mundo antiguo.

Las manías de Letizia enloquecen al presidente de Egipto y a la primera dama 

El viaje concluirá en Luxor, punto culminante de esta visita de Estado. Allí recorrerán el mítico Valle de los Reyes y el Templo de Hatshepsut, un santuario funerario considerado una joya de la arquitectura egipcia. Además, inaugurarán la nueva iluminación del complejo de Deir el Bahari, un trabajo llevado a cabo por una empresa española. No faltará la visita al Museo de Luxor, donde comprobarán el papel fundamental de las misiones y excavaciones españolas en la zona.

Todo bajo un control estricto. El equipo de asesores de Letizia no se despega ni un segundo de ella, pendientes de que nada falle, de que no le falte detalle. La agenda es tan apretada como simbólica: Egipto se ha convertido en escaparate del poder de la monarquía española, aunque por dentro sea Letizia quien brille con luz propia en cada aparición.

Son muchas las manías de Letizia que han hecho que este viaje sea realmente un incordio para el presidente de Egipto y su primera dama. Pilar Eyre destapó algunas de sus manías. La monarca siempre obliga a sus asesores a pedir un hotel solo para ella, no duerme con Felipe VI, signo de una mala relación entre ellos. Además, pide un lavabo solo para ella que se debe limpiar a consciencia antes de su visita, tiene que estar reluciente porque es muy escrupulosa.

Letizia viaja a El Cairo
Letizia viaja a El Cairo