Carolina de Mónaco siempre demostró el gran cariño que le tiene a su gran amiga Carole Bouquet, a quien considera como una hermana. Lo cierto es que la actriz francesa, desde que obtuvo fama, experimentó una vida devastadora llena de excesos y de adicción a las drogas. Desde que apareció junto a Carolina de Mónaco y, en general, en los eventos de la principal familia monegasca, se convirtió en un miembro oficioso del clan Grimaldi durante décadas. Desde 2019, su papel de íntima pasó a mayores gracias a la boda de Carlota Casiraghi con su hijo mayor, Dimitri Rassam, pasando de ser una hermana elegida para la royal a consuegra.  

Pero no todo era color de rosa, durante una entrevista para una revista de psicología, la propia intérprete confesó que cuando solo tenía 20 años agobiada por sus circunstancias familiares, cayó en las drogas. Según lo recogido por el sitio web de Mujer Hoy, junto a su hermana, tuvo que hacer un alto en su vida para cuidar de su padre, enfermo de cáncer. Durante todo un año tuvo que dedicarse a él, sin más ayuda que la de su hermana. Agotada y sola, se refugió en las drogas para amortiguar la cruda realidad que tenía que enfrentar. 

Carole Bouquet experimentó una época en la que ejercía como la nueva actriz más bella del panorama cinematográfico, y la 'socialite' más salvaje y divertida de los clubes de París. La fotografiaron junto a los hombres más famosos de la noche. Por suerte, la celebridad supo salir por sus propios medios y cortar con sus adicciones. Lo que no pudo evitar fue enamorarse de hombres que no habían conseguido hacerlo. 

Vida amorosa de Carole Bouquet, la amiga de Carolina de Mónaco 

El citado medio asegura que, a los 21 años, Carole Bouquet se casó con el productor Jean-Pierre Rassam, padre de Dimitri Rassam, después de un flechazo por las drogas que ambos consumían. El hombre era 16 años mayor, y un adicto que jamás abandonó la mala vida. Tal esa su adicción que se suicidó a los 43, tras siete años de convivencia, con una sobredosis de barbitúricos. Cuando se suicidó su padre, Dimitri tenía solo tres años, los mismos que la mujer cuando fue abandonada por su madre. 

Los hombres que llegaron a la vida de Carole Bouquet tras el suicidio de Jean-Pierre tampoco le dieron muchas alegrías ni fueron duraderos. Su segundo amor, el fotógrafo Francis Giacobetti, 18 años mayor, se convirtió en el padre de su segundo hijo, Louis, pero no en una pareja duradera. Tampoco superó el lustro con el inmunólogo Jacques Leibowich. Sí estuvo una década con el actor Gerard Depardieu, cuya fama le precede. 

Vida de Carole Bouquet en la actualidad 

Hoy en día Carole Bouquet lleva una vida de lujo y tranquilidad junto al millonario Phillyppe Sereys de Rothschild, con quien vive en la isla italiana de Pantelaria y en la que recibe a Carolina de Mónaco y sus hijos. Sin embargo, su pasado no deja de atormentarla.