Felipe VI no puede vivir nunca tranquilo, a los problemas de representar a un país, se le añaden los de su familia, como cualquier otra persona. El monarca vivió el momento más tenso de su carrera hace una década. Sus inicios fueron los peores momentos de la institución, y es que tenía que desvincularse totalmente de los Borbón, por mucho daño que eso le produjese. Las polémicas de Juan Carlos I y el caso Nóos hicieron mucho daño. Ahora mismo parece que todo eso es pasado, pero está más cerca de lo que parece, ya que ambos protagonistas de estas historias continúan poniéndose en el foco mediático por una cosa o por otra.
Iñaki Urdangarin concedió una entrevista exclusiva a ‘La Vanguardia’ hace poco más de una semana para presentar su marca de coaching empresarial. Pero además habló brevemente de Ainhoa Armentia, sus años en prisión o del divorcio de la infanta Cristina, temas que tiene totalmente vetados tal y como se firmó en una de las cláusulas de su divorcio. Si se salta esta norma podría perder todo el dinero que percibe por su silencio. Se habla de dos millones de euros en concepto de indemnización por un libro que le ofrecieron escribir y al que renunció, y 25.000 euros que se embolsaría cada mes. Unas cantidades desorbitadas que le permitirían vivir como un millonario.
Felipe VI es quien pidió a Juan Carlos I que zanjase ese tema en el que él estaba mucho más relacionado de lo que parecía. Sin embargo, parece que algo ha pasado entre ellos desde que se ha divorciado de la infanta Cristina de forma oficial porque Pilar Eyre ha comunicado en la revista ‘Lecturas’ que han vuelto a tentar a Iñaki Urdangarin con un nuevo libro con sus memorias y habría aceptado. La periodista poner enero de 2026 en el horizonte.
Iñaki Urdangarin culpa a Juan Carlos I de sus años en prisión
El exjugador de balonmano ya las habría terminado y saldrían a la luz a principios de año. En ellas hablaría de su etapa como deportista, pero también de su relación con la infanta Cristina y los Borbón o su etapa en la cárcel por el caso Nóos y nadie sabe qué puede decir entre sus páginas.
Una de las personas a las que criticará duramente es Juan Carlos I, para quien en otros años fue como un padre. Según él, “me sacrificó, me dejó caer”, y es que nunca le perdonará que entrase en prisión cuando también lo tendrían que haber hecho ellos.
“Iñaki está muy solo”, dice un amigo suyo a Pilar Eyre, “todos le dan de lado y, pese a que ha cumplido su deuda con la sociedad, nadie olvida su pasado. Y él quiere contar su verdad”. Felipe VI le tiene mucho miedo y ya se ha querido informar sobre esas memorias, se las va a leer antes de que se publiquen.
