El matrimonio de Felipe VI y Letizia ya no engaña a nadie. Llevan años separados, unidos solo por la institución y por el guion que dicta la Corona. Igual que pasó con Juan Carlos y Sofía, la convivencia se ha roto, pero ahora ni siquiera hacen esfuerzos por disimular. Cada uno va por su lado, cada uno organiza su vida sin preocuparse por las apariencias.

Letizia y Felipe VI incendios
Letizia y Felipe VI incendios

Este lunes 15 de septiembre Letizia cumple 53 años, pero decidió festejarlo antes, el sábado por la noche, con una cena discreta en Zarzuela. Amigos de confianza, algún familiar cercano y un ambiente relajado, lejos de la rigidez de los actos oficiales. Sin embargo, la silla más importante estaba vacía: Felipe VI no apareció por la celebración. El rey prefirió marcharse a Jaén, donde disfrutó del fin de semana con planes muy distintos a los de su esposa.

El detalle no ha pasado desapercibido. Un cumpleaños sin marido es toda una declaración de intenciones. La reina organizó la cena en su residencia, invitó a los suyos y brindó por su nueva edad sin que Felipe la acompañara. El contraste resulta demoledor: mientras ella se rodea de Paloma Rocasolano y de su círculo de confianza, él busca refugio lejos de Madrid, sin importarle la fecha ni el simbolismo.

Letizia se queda en Zarzuela de cumpleaños y Felipe se marcha a Jaén con amigos 

La excusa oficial es que Felipe tenía compromisos en Jaén. En realidad, no había agenda institucional, solo planes personales. Algo que confirma lo que ya se susurra desde hace tiempo: los reyes funcionan como un equipo de trabajo, nada más. Se ven en actos públicos, sonríen cuando toca, pero la vida privada discurre por caminos paralelos.

En Zarzuela, la imagen fue clara: Letizia celebrando con los suyos, sin un solo Borbón en la mesa y con Felipe ausente. En Jaén, el monarca disfrutando de su particular escapada, sin preocuparse por dar explicaciones. La distancia entre ellos es evidente y ya no la esconden.

La situación recuerda inevitablemente a la de sus padres, Juan Carlos y Sofía, cuando cada uno vivía su vida por separado. Pero en este caso, Felipe y Letizia ni siquiera guardan las formas. Un cumpleaños sin marido, un rey que se marcha a Andalucía y una reina que se rodea de los suyos en soledad. El matrimonio, reducido a un acuerdo laboral. El amor, hace tiempo, abandonó Zarzuela.

Felipe, Letizia, Leonor y Sofía en la previa de los Premios Princesa de Girona 2025 / Casa Real
Felipe, Letizia, Leonor y Sofía en la previa de los Premios Princesa de Girona 2025 / Casa Real