Después de años de distancia y tensiones, la Casa Real española podría estar a punto de dar un giro significativo en torno a una de sus figuras más controvertidas: el rey emérito Juan Carlos I. A punto de cumplir cinco años desde su exilio voluntario en Abu Dabi, el monarca retirado prepara discretamente un cambio de residencia. Ya no se trata de regresar a España, una opción que sigue siendo inaceptable para su hijo, el rey Felipe VI, sino de instalarse en un lugar más próximo, desde donde vivir sus últimos años con mayor cercanía a su familia y bajo menos presión, y desde donde viajar más rápido a España en caso de fallecer.
El emérito, consciente de que su salud se deteriora, no quiere morir lejos del país que gobernó durante casi cuatro décadas. Pero también sabe que su regreso abriría una crisis institucional. La solución: Cascais, donde vivió su juventud tras el exilio borbónico de 1931. Elegante, discreta, bien conectada con Madrid y con un clima amable, la ciudad representa un punto de equilibrio entre el destierro total y la reincorporación polémica.

Juan Carlos I se acerca a España
La llamada “Operación Cascais” no es improvisada. Fue barajada ya en 2020, cuando se negoció su salida de España. Hoy, esa posibilidad cobra sentido con una red de apoyos portugueses que han ofrecido alojamientos privados y servicios médicos de calidad. Empresarios cercanos a la familia facilitarían el asentamiento del emérito en un entorno controlado, sin el foco mediático español.
La clave de este movimiento ha sido la infanta Elena, que no solo ha acompañado a su padre en su etapa más delicada, sino que ha trabajado incansablemente para acercarlo de nuevo al entorno europeo. En este sentido, Elena siempre ha sido muy de su padre, sin importarle las humillaciones que ha tenido que soportar su madre, la reina Sofía, a lo largo de décadas.

Si Juan Carlos se muda a Portugal, Froilán volverá a España
Un movimiento, el de la mudanza de Juan Carlos a Portugal, que no se producirá solo. En el camino, ha surgido un acuerdo inédito entre los hermanos: si Juan Carlos I se establece en Portugal, más concretamente en Cascais, su nieto Froilán podrá regresar a vivir a España.
La presencia del joven en Abu Dabi, sin su abuelo como figura de control, deja de tener sentido. No se quedará solo en Abu Dabi, no es viable. Si Juan Carlos se traslada a Portugal, Froilán podrá establecerse de nuevo en territorio español. Teniendo en cuenta que las intenciones del emérito pasan por mudarse en julio y evitar así ya la época más calurosa en Abu Dabi, el regreso de Froilán será más pronto que tarde.