Existe una constante en los 4 matrimonios de la Familia Real: todos (excepto la infanta Elena) se han casado con celebrities, con personas no anónimas sino famosas. A Juan Carlos lo hicieron casar con la princesa no heredera de una Corona extinguida como la griega. La infanta Cristina se enamoró de uno de los jugadores de balonmano más importantes de la historia, figura del dream-team de Valero Rivera en el Barça y de la fabulosa selección olímpica. Y Felipe se enamoró mirando la tele, concretamente el Telediario. Quedó cautivado de la presentadora Letizia Ortiz e hizo que se la presentaran. Le ofreció ser la futura reina y la periodista prefirió las moquetas a los platós. Letizia era muy famosa, como Iñaki Urdangarin o como la princesa Sofía de Grecia. Jaime de Marichalar era un noble venido a menos y su matrimonio fue el más efímero de todos. Este verano un libro recupera la historia de Letizia. Es Letizia Vetusta de Martín Bianchi. En uno de los capítulos publica el nombre de las dos presentadoras de TVE que no eran Letizia a quienes se atribuyó haber sido amantes de Felipe, no novias oficiales sino aventuras de soltero. Uno de los nombres es especialmente sonado porque también fue amante del padre de Felipe, el rey Juan Carlos. La típica endogamia de los Borbones llevada al paroxismo: padre e hijo compartían amante.
El libro da el nombre de las dos famosísimas compañeras de Letizia a TVE que sonaron como amantes de Felipe: "Las teles empezaron a especular sobre quién sería la prometida. Desde Casa Real se había indicado que la noticia iba a salir de forma oficiosa. Algunos periodistas aseguraron que podía tratarse de la presentadora Anne Igaritubu o de la modelo Inés Sastre, con la que habían relacionado al príncipe en los años noventa”. Dos famosas amantes del príncipe: Inés Sastre y Anne Igartiburu. La modelo ya había sido novia de Felipe pero la bomba de neutrones es la presentadora vasca de Corazón. Porque los rumores siempre le habían atribuido a Anne una relación clandestina y muy íntima con Juan Carlos. Telecinco fue el primer medio que publicó que Igartiburu es una más de la larga lista de amantes famosas de Juan Carlos. Lo que nadie aclara es si padre e hijo compartieron amante simultáneamente o primero uno y después el otro. El mal gusto sería similar en ambos casos. Quizás compartirla al mismo tiempo es peor.
Padre e hijo comparten gusto, por ejemplo por las mujeres rubias: de Corinna a Eva Sannum. Pero en cuestión de amantes, el padre supera de mucho al hijo. Telecinco, en el programa de Emma García, hicieron un listado de las amantes famosas de Juan Carlos: Bárbara Rey, Corinna, Marta Gayá, Paloma San Basilio, Antonia Dell Atte, Raffaella Carra y Anne Igartiburu. En Zarzuela nadie se enamora de un médico o de una arquitecta. Todos quieren lo que ven en las revistas. El problema de seguir el mismo cliché, casarse con famosos, es que acostumbra a tener el mismo final: los cuatro matrimonios reales han fracasado: dos divorcios, los de las infantas Cristina y Elena, y dos separaciones, la de Juan Carlos con Sofía y la actual de Felipe y Letizia que después del asunto Del Burgo, como ha escrito Pilar Eyre, viven vidas privadas autónomas. Seguramente el problema es otro: casarse con un Borbón debe ser insoportable. Ni tener la vida solucionada compensa.