El matrimonio de Felipe y Letizia ya no existe. Se mantiene la apariencia, la ficción, como institución del Estado pero no como realidad familiar. La Corona está planteada para simbolizar la unidad y la estabilidad y son exactamente las dos cosas que NO representan Felipe y Letizia: ni unidad ni estabilidad. Cuando la reina decidió meterse en la cama de su cuñado mientras Felipe recibía informes de los escoltas en tiempo real que le explicaban la aventura extramatrimonial de su mujer, Letizia sabía lo que hacía. Le enviaba una señal a Felipe: "Esto es lo que hay" y si no te gusta, divórciate con el escándalo consecuente. Nunca ningún rey se ha divorciado, ni en España ni en el mundo. Todos aguantan por el ridículo que supone representar una cosa y ser la contraria. Pero las cosas están cambiando desde que Jaime del Burgo hundió no a Letizia, que en definitiva hacía lo que quería y era sujeto activo en el engaño, sin a Felipe: el cornudo, el sujeto pasivo del engaño a ojos de los ciudadanos. Da igual si el matrimonio tenía o no un pacto. Para los ciudadanos es lo que es: unos cuernos. Felipe responde de manera cruda: ha silenciado a Jaime del Burgo y ha devuelto a Letizia la humillación de la manera más cruda: en público y en portada. La estrategia está a la vista de todos: entre semana los reyes comparten pocos o ningún acto oficial (como la semana viene que no coincidirán en ningún sitio). Y los fines de semana el rey abandona no ya Zarzuela sino Madrid. Se marcha de vacaciones al Norte de España a solas, sin Letizia, solo con amigos, y a la vista de toda la prensa local que lo ha fotografiado en cada salida. De viernes a domingo huye de Letizia. Este fin de semana en Formigal, Aragón, esquiando:

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Portada El Heraldo de Aragón 17 de marzo 2024

Felipe ha decidido que no compartirá ni un solo día de ocio con su mujer y lo hará a la vista de toda España. A veces la prensa local lo descubrirá y a veces se marchará al extranjero donde no existen diarios como El Norte de Castilla, el diario Segre o El Heraldo de Aragón que en el último mes han retratado al rey Felipe tres fines de semana fuera de Zarzuela sin Letizia: La visita sorpresa de Felipe a Medinaceli en Soria, Felipe en Baqueira de incógnito sin Letizia cada fin de semana y ahora en Formigal, en el Pirineo oscense. Tres fotos como tres puñales a Letizia:

Felipe primero cierno 2024 GTRES
Felipe primer plano GTRES

Soria, Lleida y Huesca, tres fines de semana seguidos sin Letizia, de la que no se dice doónde está cuando su marido está fuera. O se queda cerrada a casa sola, sin el marido ni las hijas, Leonor en Zaragoza y la otra, Sofía, en Gales, o también se pone tierra de por medio pero sin que la retraten, como cuando iba de la mano de Jaime del Burgo pero de camuflaje con gorra y gafas de sol. Felipe no se esconde mientras Letizia tiene que esconderse, porque iba no con amigos sino con su amante. Todo forma parte de la nueva estrategia de imagen de Camilo Villarino, nuevo jefe de Casa Real: no reconocer la crisis pero para no enfadar a los monárquicos poner distancia entre Felipe y Letizia. Y para redondear la jugada, dibujar un Felipe humilde y sin privilegios: como destaca E El Heraldo de Aragón "Felipe estuvo  guardando fila como el resto de esquiadores para subirse al telesilla de Sallent. Durante ese corto trayecto fueron muchos los que se percataron de la presencia del monarca pese al casco y el atuendo de esquí y pudieron cruzar con él unas palabras agradeciéndole su visita y deseándole un buen día de esquí. Otros aprovecharon para retratar el momento con sus móviles. "Mira, ahí está el Rey", le dijo una madre a sus hijas pequeñas". Ecenass idílicas de niñas saludando al rey y Felipe haciendo cola como un dominguero cualquiera. El contraste con la frívola Letizia es descomunal.

Letizia Ortiz y Jaime del Burgo, amantes en NYC, 2011, TV3

Letizia con Jaime del Burgo, amantes en Wall Street (Nueva York), 2011, TV3

Felipe deja claro que vive separado de su mujer en la práctica, que el matrimonio guardará las apariencias en actos oficiales donde él ni la mira, ni la toca ni la sonríe. Pasa de la reina. Y Letizia mastica el divorcio que llegará más temprano que tarde. Si la relación se hace insoportable, el divorcio será en abril de 2025 cuando la infanta Sofía será mayor de edad y Letizia no puede montar un espectáculo judicial con la custodia de la menor. Lo más probable es que el divorcio llegue el verano de 2026, cuando Leonor habrá acabado su formación militar en Murcia en el Ejército del Aire y pueda asumir públicamente con 21 años el rol de Letizia. La reina Leonor para destronar a la reina madre Letizia. Camilo y Felipe lo tienen todo atado y bien atado.