El verano de la familia real española está marcado por la separación de sus miembros. Nada que ver con cuando sus hijas eran menores de edad y viajaban todos juntos. Ahora cada uno va por su lado. Felipe VI y Letizia viajaron juntos a Grecia, concretamente a Tesalónica, según los movimientos del Falcon. Sin embargo, apenas llegaron, decidieron tomar caminos distintos. Felipe permaneció en la ciudad, mientras Letizia inició un recorrido privado con su círculo más cercano.

La reina no siguió únicamente la agenda oficial. Eligió un viaje de descanso absoluto, con privacidad total. Las imágenes junto a Felipe son ahora cada vez más escasas. Fuentes cercanas aseguran que su relación se ha vuelto más protocolaria que emocional. No comparten planes diarios ni momentos de intimidad; la vida pública domina sus jornadas.

Felipe y Letizia / Europa Press

La reina Letizia cambia Grecia por la República Dominicana

Letizia alquiló un yate de lujo, valorado en varios millones de euros. Allí disfrutó de días de relax, acompañada de su entorno más íntimo. Algunos rumores apuntan a que viajaba con una persona cercana a ella, con algún tipo de vínculo especial. La discreción fue la prioridad en todo momento.

Tras la travesía, su destino final fue la República Dominicana. Allí posee una mansión privada donde pudo gozar de tranquilidad y privacidad. La llegada de Letizia requirió la movilización de la escolta de Casa Real desde Tesalónica, asegurando su protección durante el traslado internacional y durante su estancia en el país centroamericano.

Felipe VI, responsable con su papel como Jefe de Estado

Mientras Letizia disfrutaba de su retiro, Felipe VI tomó decisiones más responsables y coherentes con su figura. Redujo sus vacaciones para estar cerca de las autoridades frente a los graves incendios que afectan España. Su agenda combinó obligaciones oficiales, mostrando su papel como Jefe de Estado, con decisiones personales, aprovechando para visitar a su madre, la reina Sofía.

Felipe VI en Torrejón de Ardoz 

El domingo pasado, Felipe visitó el Cuartel General de la UME, en la Base Aérea de Torrejón. Allí recibió información actualizada sobre el despliegue de recursos y la organización de las tareas de extinción. Su actuación resalta la diferencia con el retiro privado de Letizia, centrado en la comodidad y la privacidad. Para ella, sus vacaciones son sagradas.