No ha sido capaz de forzar a las fuerzas políticas españolas a formar gobierno, sobre la cuestión catalana hace tiempo que ni está ni se lo espera, pero no por eso el rey Felipe VI deja de tener una intensa actividad en Zarzuela. Las últimas semanas ha tenido que sacar minutos de su apretada agenda para hacer de modelo: se ve que en Palacio no hay bastantes cuadros de su regia figura y ahora han encargado otro para que cuelgue de las paredes reales. El próximo 4 de octubre verá la luz un nuevo cuadro, un nuevo retrato del Borbón. Veremos si provoca la misma mofa que el penúltimo, un cuadro de Felipe que cuelga en el Congreso y que costó la pequeña cifra de 88.000 euros o que el último, una ridícula imagen del monarca sonriendo ante un cuadro suyo vestido de militar.
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Ahora, el afortunado en retratar a Felipe es un pintor malagueño, Antonio Montiel. Hace años ya pintó a la madre de la criatura, la reina Sofía. Y ahora ha dibujado un cuadro oficial del rey que formará parte de la galería del Ejército y ha revelado para el diario El Español los secretos de la gestación del cuadro. Explica que el Ejército sólo tenía fotos del rey. No se podía permitir que no tuvieran también un retrato del Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra. El artista sólo puso una condición: que el rey posara para él. "Siempre sale mejor cuando la persona posa. Siempre es mucho mejor el original que la foto". Antes de la sesión, un encuentro con el rey durante dos horas donde le hizo más de 400 fotos con diferentes posturas y luces: "lo más gracioso es que era él quien me daba indicaciones, me decía que cambiáramos de postura, que lo hiciéramos sentado, de pie...".
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Felipe quería hacer de director artístico, pero también recibió alguna reprimenda: "Yo le daba algunas indicaciones porque a veces se ponía muy serio o se mordía un poquito el labio...". No sólo lo abroncó por estos tics. También, "a modo de broma", dice Montiel, "mientras posaba incluso le llamé un poco la atención para que en algún momento metiera un poquito de estómago y así quedara perfecta la figura". Vaya, hay alguien que se salta las cremitas y healthy food que pregona siempre Letizia. Una Letizia y un Felipe que el pintor no sabe si estarán cuando se presente el resultado final: "Todavía no se sabe. No ha llegado la convocatoria. No sé a qué estarán esperando pero de momento no ha habido una negativa".
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Ahora queda pintar a Letizia. Hace unos meses, Felipe y el artista coincidieron y él le preguntó cómo iba el retrato. La reina lamentó no haber estado cuando tomó apuntes sobre Felipe en el primer encuentro. "Yo le respondí: "Será un honor algún día poderla retratar a usted". Y su respuesta fue directa. Letizia me dijo: "Me encantaría". Esas fueras sus palabras. Me cogió del hombro y todo en ese justo momento. La verdad, espero hacerlo". Veremos si ella también se muerde el labio. Lo que es seguro es que no le llamará la atención para que esconda barriga.