Letizia ha cometido muchos errores pero su gran acierto es cómo ha apartado a Leonor de sus primos Borbón. La prensa monárquica mataría por imágenes de la princesa con los Urdangarin y, sobre todo, con los Marichalar, a los que la prensa madrileña tapa las vergüenzas y les considera de los suyos: carcas, monárquicos, holgazanes, haciéndose los aristócratas, fumadores, bebedores y sin oficio ni beneficio. El más peligroso es Froilán, ahora exiliado en los Emiratos para evitar acabar detenido, en comisaría o ante el juez de guardia. Pero quien se ha quedado es la más exhibicionista, Victoria Federica. Ha aprendido del padre a no hacer nada y de la madre su atracción por los hombres de clase proletaria. Elena era famosa por tirar la caña a jinetes, guardaespaldas y hombres no aristocráticos. Su hija ha heredado también el exhibicionismo de su padre, desfilando para marcas comerciales y cobrando de las empresas solo por figurar. Su técnica cutre de seducción la acaba de explicar un camarero en Telecinco, en el marco de un acto publicitario de Victoria Federica para la marca Schweppes, Estas son fotos del Instagram de la sobrina del rey, anunciando una bebida:
Victoria Federica haciendo anuncios, Instagram
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— Telefónica (@Telefonica) April 19, 2024
Pero otras siguen igual: el apoyo de Casa de SM el Rey (@CasaReal) en… pic.twitter.com/54oyWWJ0eX
España es un país donde casi nadie se escandaliza porque el rey Felipe aparezca, como acaba de suceder, en una publicidad de Telefónica. Así que nadie se da cuenta de la pésima imagen que ofrece la Familia Real cobrando por hacer anuncios bebiendo un combinado con naranjada de marca. Victoria Federica pasa por caja y cobra por el anuncio en su Instagram, pero el programa Socialité aprovecha y se pone en contacto con un camarero, que debió ser el del estand de Schweppes, que explica cómo la prima de Leonor tiene predilección por los camareros, especialmente en las bodas cuando ya ha bebido algún destilado, y les tira los tejos, se los quiere ligar de la manera más chapucera. El camarero da pelos y señales del comportamiento "poco royal" de Vic.
El camarero de una empresa de catering madrileña coincidió con Victoria Federica sirviéndole copas en algunas bodas y revela cómo se comporta la sobrina de Felipe: "Ha tonteado conmigo y con más compañeros. Al pasar con la bandeja nos daba conversación y se interesaba por el nombre de algunos chicos. No tiene problema en coquetear o llamarte guapo delante de todo el mundo. A mí varias veces se me ha acercado y me ha rodeado con el brazo mientras trabajo. Se toma unas confianzas... Me sorprendió muchísimo".
Si el protocolo advierte que no se debe tocar a los reyes, la sobrinísima va al revés: soba a los camareros, les llama guapo en voz alta, les pide el nombre y flirtea a ver si se lleva alguno al huerto. El camarero, cohibido, la llama disfrutona. E inapropiada tratándose de quien es. Letizia tiene razón: Leonor, lejos de las primas. Victoria es la tercera en la línea sucesoria de Leonor. Tras Sofía y Froilán reinaría la chica Schweppes.