La figura de Bárbara Rey ha vuelto a sacudir los cimientos de la Casa Real española. Aunque en esta ocasión le estaría haciendo un favor.  La actriz y vedette murciana habría alcanzado un acuerdo con Zarzuela para silenciar uno de los capítulos más delicados de su nuevo libro: la supuesta doble vida de la reina Sofía.

El inminente lanzamiento de sus memorias, tituladas Yo, Bárbara, ha generado pánico en palacio. En un primer momento, se esperaba que el libro se centrara en su tormentosa relación con el rey emérito Juan Carlos I, con quien mantuvo un vínculo íntimo durante años. Sin embargo, lo que ha alarmado a los círculos más cercanos a la monarquía no es lo que cuenta sobre él, sino lo que podría revelar sobre la reina Sofía.

El llibre de Bárbara Rey
El libro de Bárbara Rey

Bárbara Rey sabe demasiado sobre la reina Sofía

La reina emérita Sofía, siempre descrita como discreta, digna y reservada, ha soportado décadas de infidelidades con una paciencia legendaria. Pero fuentes que han accedido a los escritos afirman que su historia incluye nombres que comprometerían esa imagen pública. Se trataría de relaciones personales mantenidas en la más absoluta confidencialidad, que involucrarían a figuras del ámbito cultural, político e incluso internacional.

Entre los nombres que han circulado figuran el exministro y director general de la UNESCO Federico Mayor Zaragoza, el periodista Juan José Benítez, el viudo de la duquesa de Alba Alfonso Díez, el premio Nobel Muhammad Yunus, el cantante Georges Moustaki, el empresario Carles Ferrer Salat, e incluso un viejo amor de juventud, el rey Harald de Noruega. La posibilidad de que estos episodios fueran expuestos en las memorias ha desatado una crisis de gestión en la Zarzuela.

reina sofia cabizbaja
Reina Sofía cabizbaja

Bárbara Rey acepta excluir los secretos que conoce de la reina Sofía

En este escenario, la propia reina Sofía habría pedido ayuda a su hijo, el rey Felipe VI, para frenar lo que podría convertirse en una humillación pública sin precedentes. El monarca, a través de intermediarios de confianza, trasladó a Bárbara Rey un mensaje claro: la reina debe quedar fuera del libro. Ni menciones directas ni insinuaciones que pongan en duda su integridad, ni detalles que puedan comprometer su imagen pública.

El mensaje fue recibido. Y Bárbara habría aceptado el pacto. Con esta decisión, Bárbara Rey renuncia a una parte explosiva de su historia, pero también protege su posición dentro del relato. La Casa Real, por su parte, logra evitar una tormenta mediática que habría puesto en el centro del huracán a la figura más intocable del linaje borbónico. Un win win. En cualquier caso, se desconoce que habría recibido la artista a cambio de aceptar tan fácilmente este pacto.