El nombre de Bárbara Rey es un nombre que siempre genera controversia en las altas esferas de la casa real. Durante décadas, su figura ha sido una amenaza latente para la monarquía española, debido a su estrecha relación con el rey emérito Juan Carlos I. Y ahora la tensión ha alcanzado un nuevo punto de ebullición.

Durante años, Bárbara guardó silencio. Aunque era conocida la existencia de un vínculo íntimo entre ella y el emérito, la falta de pruebas permitía a Zarzuela mantener el control. Pero todo cambió cuando salieron a la luz unas fotografías comprometedoras publicadas por una revista extranjera. En ellas, el rey Juan Carlos aparecía junto a Bárbara Rey en una actitud que confirmaba lo que durante tanto tiempo fue un secreto a voces. Las imágenes fueron un auténtico terremoto para la institución.

Portada revista Privé Bárbara Rey i Joan Carles
Portada revista Privé Bárbara Rey y Juan Carlos

Bárbara Rey se dispone a publicar unas memorias que podrían ser un nuevo golpe a la corona

Lejos de que esta confirmación fuera el punto y final a este episodio, ahora un nuevo golpe está a punto de azotar a la corona. Bárbara Rey anunció recientemente la publicación de sus memorias: Yo, Bárbara Rey, un libro que promete desvelar detalles inéditos de su relación con la Corona. El anuncio ha generado pánico en Zarzuela, donde temen que lo que ella revele pueda dañar irremediablemente no solo la figura del rey emérito, sino a otros miembros de la familia real.

Ante este panorama, el propio Felipe VI ha movido ficha. A través de intermediarios, ha hecho llegar a Bárbara mensajes concretos. El más claro: no tocar a la reina Sofía. El actual monarca ha exigido que su madre quede fuera del relato, que no se publiquen detalles que puedan afectar a su reputación, ni insinuaciones que la dejen en una posición vulnerable o supongan una nueva humillación.

Reina Sofia
Reina Sofia

Felipe VI interviene para evitar un nuevo agravio contra la reina Sofía

Bárbara Rey sabe más de lo que ha dicho. Durante su relación con Juan Carlos, fue testigo de conversaciones, actitudes y dinámicas que comprometen a más de un miembro de la institución. Ha tenido acceso directo a los secretos mejor guardados de la monarquía. Algunos de ellos, según se rumorea, podrían incluso afectar al presente de la Casa Real. Y en los pasillos de Zarzuela lo saben.

El entorno de Bárbara asegura que ella está decidida a hablar, pero también es consciente del poder que tiene su testimonio. Sabe que lo que publique puede cambiar el relato oficial de una parte importante de la historia reciente de España. Es por eso que Felipe VI se ha visto obligado a mover ficha.