En los últimos años, Iñaki Urdangarin ha estado en proceso de reconstruir su vida tras salir de prisión, buscando dejar atrás los escándalos que marcaron su pasado. Tras cumplir su condena, el ex duque de Palma ha dado pasos para retomar su camino, viviendo en Vitoria en un piso que comparte con Ainhoa Armentia, su pareja. Con un perfil más discreto y alejado de los focos, trata de enfocarse en su vida personal y familiar. Sin embargo, los rumores recientes apuntan a que la relación con su novia podría estar atravesando una crisis profunda que, según algunos, va en aumento.
Desde que inició su relación con Ainhoa Armentia, en un momento especialmente delicado, la historia de Iñaki Urdangarin estuvo determinada por antecedentes que parecen complicar aún más su situación hoy en día. Antes de su relación con la infanta Cristina, ya tenía un pasado de romances y relaciones con distintas jóvenes. Un ejemplo claro fue Carmen Camí, quien fue su prometida antes de que su relación con Cristina saliera a la luz. Ella misma declaró haberse enterado de la ruptura con el exdeportista cuando los medios anunciaron su noviazgo con la hija del emérito, lo que evidencia que su carácter conquistador no es un secreto.
Además, en el juicio por el caso Nóos salieron a la luz mensajes que Urdangarin compartía con la mujer de un amigo, en fechas en las que todavía estaba casado con la madre de sus hijos. Estos antecedentes, que Ainhoa ha preferido quizás ignorar o minimizar desde que inició su relación con él, no dejan de tener un peso y un significado. La historia del que fuera jugador del Fútbol Club Barcelona, marcada por estos episodios, parece estar influyendo en la dinámica de su relación actual.
Las señales de que Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia están en un momento difícil
En los últimos tiempos, la estabilidad entre ambos se ha visto afectada por diversos problemas. Uno de los más destacados es la dificultad para que los hijos de cada uno puedan llevarse bien. Ni los hijos de Armentia ni los de Urdangarin parecen querer mantener un vínculo cercano, lo que genera tensiones adicionales en la pareja.
Otros acontecimientos recientes encendieron las alarmas, como un viaje a Barcelona para una reunión con amigos, han avivado los rumores: en esa ocasión, el guipuzcoano fue visto en compañía de su exesposa en un encuentro en casa de su hijo Pablo. La presencia de la hermana de Felipe VI en estos encuentros, y la ausencia de su novia, parecen indicar que el trato entre ellos se ha estrechado en los últimos tiempos.
Todo esto sucede en un contexto de creciente presión mediática y estrés emocional. La falta de confianza, las dificultades para gestionar la convivencia entre dos familias y la constante atención de los medios parecen estar afectando a esta pareja. Aunque siguen juntos, todo parece indicar que la crisis podría estar en su punto más álgido.
La historia de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia está en un momento complicado, donde el pasado y las circunstancias de sus vidas se entrelazan en una trama que, por ahora, no muestra signos claros de resolución. Solo el tiempo dirá si podrán superar estos obstáculos o si, por el contrario, este será un punto de inflexión.