El 19 de junio de 2015 falleció una gran artista, Lina Morgan. La humorista padecía un cáncer de garganta que ocultó a la prensa y a sus amigos más cercanos. Siempre ha sido una persona muy discreta con su vida privada. La actriz iba a rodar con total normalidad. Lina murió completamente sola, ya que no tenía hijos. Nunca llegó a formar una familia. Tuvo algún que otro gran amor, como José Antonio Martínez Uranga, un famoso empresario taurino, pero siempre ha vivido sola.
Mucho se habló de su vida amorosa y especialmente de su legado. La artista cambió su testamento hasta en seis ocasiones, la última en 2013. En esa hubo cambios significativos plasmados en dos cláusulas. "Lega a Don Abelardo González Álvarez la mitad de su herencia, que le será satisfecha en metálico e instituye y nombra como único y universal heredero de todos sus bienes, derechos, créditos y acciones a Don Daniel Pontes de Dios".

Daniel Pontes fue su mano derecha. Durante todos sus años de trabajo estuvo a su lado como chófer. La esposa de éste ejerció como asistenta del hogar en casa de Lina. Aseguran que Daniel jugó un papel esencial durante la enfermedad y posterior fallecimiento de José Luis, hermano de la cómica.
Sin embargo, la versión de Ángel Gutiérrez es bien distinta. Éste explica que fue él quien estuvo en el funeral del hermano de la humorista. Se distanciaron cuando él enfermó y tenía miedo que se filtrasen detalles de su intimidad. Dos meses después se conoció públicamente la muerte de su deceso.
Lina Morgan cambió hasta en seis ocasiones su testamento
Las versiones de Daniel y Ángel también son distintas en referencia al dinero de Lina. El primero detalle que solo dejó en herencia dos millones de euros y un piso, mientras que el segundo revela que en 2006, la actriz tenía 500 millones de las antiguas pesetas. La relación entre Ángel y Lina acabó mal. Tras varias auditorias que arrojaron que la gestión económica de Gutiérrez era correcta, llegó el despido.

A partir de ese momento, "Daniel Pontes tuvo vía libre. Él único que podía pararlo era yo y consiguió quitarme de en medio", expresó el administrador. La última vez que se habló con Daniel aseguró que vivía en su casa de siempre sin lujos y que el 70% de la herencia de Lina Morgan se la llevó Hacienda, ya que no era ningún familiar directo, ni tan siquiera de segunda.
Lina Morgan siempre fue una mujer muy sencilla. De hecho, venía de una familia muy humilde. Lo pasó realmente mal hasta que triunfó en el mundo del espectáculo. La artista se preocupó mucho por sus padres, sin embargo, dio la espalda al resto de familiares. Tenía dos sobrinas nietas, Olga y Estefanía Ruiz, con quien la madrileña se llevaba muy bien en su infancia. Lina Morgan les cerró la puerta, incluso no las dejaba entrar al teatro. Ella es la única que las podría haber salvado de la marginalidad. Sufrieron abusos físicos y psicológicos. A los quince años su madre las obligó a prostituirse. Antes ya tomaban drogas. A día de hoy viven en la marginalidad.