Este fin de semana no hay partidos de Liga. La final de la Copa del Rey entre el Athletic Club y el Mallorca en Sevilla ha paralizado la competición, de manera tal que los jugadores del Barça podrán preparar mejor el trascendental partido de ida de los cuartos de final de la Champions contra el PSG del próximo miércoles. Una eliminatoria que llega en el mejor momento de la temporada para los de Xavi Hernández, que están en muy buena dinámica de juego y resultados, y que esperan dar la campanada contra el conjunto francés de Luis Enrique y Mbappé. Y si el Barça está bien, si lo personalizamos en algunos jugadores, veremos que algunos de los futbolistas del vestuario azulgrana también están pasando por su mejor momento de la temporada: la irrupción de los jóvenes como Lamine Yamal y Cubarsí, Koundé, Gundogan, Raphinha... y Sergi Roberto.

El capitán del Barça, que ha vuelto a entrar en el once después de una lesión, lleva un par o tres de partidos sensacionales. Marcando goles decisivos, o dando cuerpo al centro del campo azulgrana con su presencia. El mejor momento para un jugador, antes de recibir al conjunto parisino, que si tiene un momento mítico en su historia como jugador, es precisamente contra el PSG, con aquel gol que nos pone la carne de gallina a los culés, culminación de la remontada de hace unos años, aquel inolvidable 6 a 1 definitivo:

Ahora, sin embargo, a pesar de su buen momento profesional, el capitán del Barça y su mujer, Coral Simanovich, acaban de vivir un susto mayúsculo en el terreno personal. Una situación que no habrían querido vivir y que les ha encogido el corazón.

Y es que su pareja, la modelo israelí, acaba de publicar un Stories en redes explicando qué ha pasado con su hijo pequeño. Sergi Roberto y Coral tienen dos hijos, Kaia y Dylan. Y miren qué mensaje sobrecogedor escribía ella hace unos minutos: "Qué día más terrible fue el de ayer. La próxima imagen es difícil de mirar!":

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¿Y qué se ve en la siguiente imagen? Su hijo Dylan. "Así es como me he encontrado a Dylan cuando he llegado a casa después de volver de la escuela de Kaia", todo lleno de heridas.

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Coral sigue explicando que han ido corriendo hacia el hospital: "We flew to the hospital when he has such a big cut on his head. And I can't explain to you what I felt in these moments. I was so scared for my little baby" ("hemos venido volando al hospital cuando hemos visto que tenía un corte tan grande en la cabeza. Y no os puedo explicar qué sentí en estos momentos. Tenía mucho miedo por mi pequeño").

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Una vez allí, Simanovich ha explicado qué ha pasado, con su hijo con la cabeza vendada: "We stayed under surveillance until the night and Dylan got few stitches. I wish he will feel better soon. I know that things are happened a lot in childhood but it is so scary to see them like this. Thanks. It ended like this and not worse"  ("nos hemos quedado bajo vigilancia hasta la noche y a Dylan le han dado unos cuantos puntos de sutura. Espero que se sienta mejor pronto. Sé que estas cosas pasan muchas veces con los niños, pero da mucho miedo verlos así. Gracias. Por suerte no ha acabado peor").

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Un abrazo enorme al pequeño Dylan y a sus padres. Seguro que se pondrá bien y tanto él como Coral y Sergi Roberto se recuperarán pronto de este susto.