Sara Carbonero está centrada en sus hijos y en la búsqueda de la paz. Desde que padeció cáncer se toma la vida de otra manera. Valora cosas que antes no le daba ni la más mínima importancia. Como la amistad, la periodista y su compañera de profesión, Isabel Jiménez se han hecho inseparables. Ya eran grandes amigas, incluso han compartido proyectos juntas, pero ahora son como hermanas. Es su alma gemela. Se siente muy agradecida por todo el cariño que le ha dado en su época más complicada, y comparten mucho tiempo juntas.

La periodista ha salido por el centro de Madrid con su “comadre” para compartir un plan de puro relax. Ha compartido en sus redes sociales una nueva reflexión sobre este primer plan de otoño, ya que ayer mismo se cambió de estación. “Así, como quien no quiere la cosa, ha llegado el otoño. Y con él muchas cosas. Me gusta porque se ha presentado siendo muy otoño, con varios grados menos en casi todas las ciudades para que no haya dudas. El otoño es mi estación preferida del año. El otoño tiene mucho de melancólico, como yo. También es época de nuevos comienzos", comienza escribiendo Sara Carbonero. "Toca despojarnos de lo viejo, de lo que nos pesa y no suma ni aporta. Del otoño me gustan sus colores, su ritmo frenético y su nostalgia. Ah, y su aparente rutina. Lo de aparente lo digo porque está en nuestra mano hacer que cada día cuente y sea distinto, y por supuesto, que vuelven las botas", ha querido añadir.
Ambas amigas visitaron la Fundación March, “un oasis de calma y relax en pleno centro de Madrid, donde puedes desde disfrutar de su maravillosa biblioteca, hasta ver una exposición o tomar algo tranquilamente en su terraza. Y precisamente allí, leyendo en una mesa, sola y concentrada, me encontré con Fátima, mi vecina del hotel naranja de Cádiz de hace unos años. Caprichosa es la vida”.
Sara Carbonero controla la alimentación de sus hijos
Sara Carbonero también se cuida por dentro y por fuera y aprovecha cualquier momento para practicar deporte. Hace unos días salió con unas amigas a jugar a pádel, uno de sus deportes favoritos. Todas iban totalmente equipadas, como unas auténticas profesionales. Para ella es muy importante practicar deporte y llevar una dieta sana y equilibrada, unos valores que transmite a sus hijos desde bien pequeños. La periodista compartió con “Womens Health’ que “somos lo que comemos, por eso en casa no hay azúcar”.
Y no son los únicos productos que tiene limitados a sus hijos. “Cada vez menos lácteos, menos gluten y menos carne roja”. No es una persona estricta con la alimentación, pero quiere reducir todo aquello que es perjudicial o innecesario.
