De todas las presentadoras de televisión que hay en el mundo, pocas tienen tantos seguidores como Sara Carbonero. La periodista rompe la regla de las celebridades porque es de los pocos famosos que no quiere alejar su vida privada de las redes sociales. A diferencia de muchos, su perfil de Instagram está lleno de su día a día y entre fotografías propias, momentos familiares o reflexiones profundísimas, la protagonista siempre toca la fibra de los seguidores. Poco a poco, la periodista ha ido llenando su perfil de ocurrencias y, ni más, ni menos, ha conseguido a más de tres millones de seguidores. Una cifra espectacular que va creciendo, pero que no le priva de enseñar sus momentos más íntimos.
De hecho, este año, la presentadora vuelve a estar de enhorabuena porque al lado de José Luis Cabrera ha vuelto a encontrar el amor. Después de que los paparazzis los pillaran juntos en diferentes ubicaciones y estuviera en la portada de las diferentes revistas del corazón, era evidente que la presentadora acabaría publicando una fotografía en que apareciera él y, efectivamente, hace unos días lo vimos aquí mismo. En una de sus típicas excursiones, la presentadora de televisión se estrenaba en Bilbao y, tímidamente, en una de las fotografías dentro del museo del Guggenheim, aparecía él al lado de una obra de arte. Pocos lugares son mejores que este para presentar el amor. Realmente, cada vez que Sara Carbonero ama, ama con mucha intensidad, y por eso, cuando vemos instantáneas familiares en su perfil, nos detenemos, nos ponemos las gafas y leemos con tranquilidad.
Uno de los amores que tendrá de por vida, aparte de Martín y Lucas, sus hijos, es su madre, Goyi Arévalo, que ya la hemos visto alguna vez en su perfil de Instagram. Ahora que empieza el verano, la presentadora, nostálgica, ha vuelto a recordar momentos con ella y con una fotografía de las dos de hace años, ha demostrado qué es lo que más echa de menos de los veranos que tenían juntas. La instantánea es espectacular y Carbonero, pequeñísima con un conjunto azul y un babero, posa con la lengua fuera delante de la cámara. Una de sus manos va dirigida al pelo de Goyi, que mira a la cámara con cara de circunstancias. Así titula la imagen: "Aquellos maravillosos veranos.". Y punto, tan solo de oír la frase, nos las imaginamos a las dos en Corral de Almaguer, un pueblo de Toledo.
La imagen es fantástica porque define el verano de todo el mundo de quien ha veraneado en un pueblo a la perfección. De vacaciones, acompañadas de la familia y con ilusión por pasar el tiempo libre juntas, Sara Carbonero y Goyi Arévalo vivían, sin duda, los mejores veranos de su vida. Ahora, la presentadora, nostálgica, recuerda el momento mientras los seguidores lo disfrutan. Dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero nunca valdrá tanto como un recuerdo.