Hace algunas semanas que Terelu y Carmen Borrego se vieron forzadas a vaciar la casa de su madre, prácticamente un mes después de la muerte de María Teresa Campos. El deceso de la histórica de la comunicación se confirmó el 5 de septiembre, dos días después de que ingresara en la Fundación Jiménez Díaz con un cuadro de insuficiencia respiratoria aguda. Jornadas difíciles las posteriores para la familia, especialmente para sus hijas. Con todo, quien desgraciadamente haya perdido a alguien en el pasado ya sabrá de buena tinta que las gestiones están lejos de acabar una vez que han concluido las sesiones de tanatorio.

terelu campos llora europa press
Terelu Campos. / Europa Press

Las pertenencias del difunto también se tienen que reubicar, o en el caso de la periodista, ponerse a subasta. La periodista pasó sus últimos meses en vida en un piso de alquiler en Aravaca después de vender su enorme casa, y era allí donde guardaba todos sus muebles, prendas de ropa y otros muchos artículos de valor. En cualquier caso, tanto Terelu como Carmen se decantaron para no quedárselo todo —por limitaciones de espacio, pero evitando tirarlos a la basura— y conservar solo aquellos elementos con un componente emocional. Eso y que, teniendo en cuenta que el mobiliario de la matriarca del clan era exclusivísimo, también podía ser una buena oportunidad para sacar algo de pasta en función de la puja de los interesados. Evidentemente, los precios de salida no eran aptos para cualquier bolsillo.

Mundanza Campos 2 Chance
Mundanza Campos 4 Chance
Mundanza Campos 3 Chance
Vacían la casa de María Teresa Campos. / Chance

Sin embargo, parece que la cosa no les ha acabado de funcionar tan bien como podrían haber esperado. Desde el pasado 15 de noviembre, los muebles han sido expuestos a una famosa casa de subastas situada en el pijísimo barrio madrileño de Salamanca, aunque no sería hasta el 29 y 30 del mismo mes que los compradores empezarían a participar del particular juego del quién da más. En total, 831 lotes en los que se comprendían sillas, lámparas, cuadros, libros, mesas|tablas y un larguísimo etcétera. De acuerdo con las informaciones publicadas con anterioridad, en el listado de elementos disponibles había desde un montaplatos victoriano por 450 euros hasta un óleo sobre tela por 950.

Desgraciadamente, Terelu y Carmen solo han conseguido deshacerse de ocho de los muebles en las 48 horas estipuladas. Expectación máxima que ha quedado en nada, ya que según informaban en el TardeAR de Telecinco, el beneficio tampoco ha sido demasiado grande. "Solamente de 5.000 euros". Un desastre después de que prácticamente ninguna puja superara el precio de salida. Las excepciones son contadas, véanse los 1.200 euros recaudados por un lote de diez sillas lacadas en oro que originariamente se ofrecían por la mitad.

Terelu Carmen Borrego GTRES
Terelu y Carmen Borrego. / GTRES

Ahora se anuncia que habrá más margen para paliar la decepción. Sea como sea, las hijas de la Campos presumen de no querer lucrarse de eso. Su intención primera es que alguien vuelva a dar una vida a los objetos que tanto esfuerzo le valieron a su madre.