El éxito de la Rosalía sigue provocando urticaria a determinados colectivos. Que si canta en catalán. Que si es demasiado cara. Que si las uñas. Que si... La lista es cada vez más larga. O mirándolo bien, quizás cada vez es más corta. Limitadita, queremos decir. Es la única forma de definir el razonamiento del famoso cantaor flamenco José Mercé, que ha cargado contra la catalana en una entrevista en el suplemento del ABC basándose en la principal crítica que persigue a la de Sant Esteve Sesrovires: Haber osado introducir estilos urbanos en este género musical, absolutamente hermético en cuestiones estilísticas (aunque con matices). A Mercé se le ha escapado un tufillo arcaico, machista y que denota cierta envidia cuando dice que "Rosalía es muy guapa y canta muy bien, pero no todo vale ni cualquier cosita es flamenco"

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El batiburrillo del de Jerez de la Frontera es digno de estudio. Sobre todo porque, aparte de argumentar su crítica haciendo énfasis en sí la catalana es o no es guapa, y despreciar lo que hace diciendo que es una "cosita", de mirarse a sí mismo en el espejo, ni hablar. Y no lo decimos por su aspecto físico (no es Jon Kortajarena ni lo ha sido nunca), sino porque como la mayoría de los grandes cantantes de flamenco, todos han innovado, fusionado o creado nuevas sonoridades cuando lo han creído conveniente. Y todavía no han quemado a nadie en la hoguera. Sí, siempre ha habido debate, pero nada más allá. Ahora bien, parece que Mercé es un dios y su opinión va a misa. Feligreses dispuestos a aplaudirle no faltan. Aunque también hay quien (afortunadamente) discrepa.

Rosalia flamenca @rosalia.vt

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Rosalía no canta flamenco, de acuerdo. Pero "la cosita" que hace (muy bien, por cierto) arrastra a una legión de seguidores que ya la quisiera. ¿No le gusta? Perfecto. ¿Que tenga que hacer el comentario sexista para justificar su punto de vista? Fatal. Será un "flamenco 100%" (o no), pero acaba de hacer un gallo que ni Leonardo Dantés.