El tanatorio de Sancho de Ávila se llenó de personas que querían a Rosa Maria Sardà. En Fase 1 del coronavirus, el cáncer se ha llevado a la actriz más importante de su generación y queda pendiente un homenaje del mundo del teatro. Xavier Sardà fue a despedirse con su mujer Ana Gutiérrez. Su ex y padre de su hijo, Josep Maria Mainat, fue quien más rato acompañó a Pol Mainat Sardà en el adiós. También el trinco Toni Cruz y amigos de Xavier Sardà como Boriz Izaguirre, Carlos Latre o Manel Fuentes, único sin mascarilla en la calle:
EP
El cine, el teatro y la TV le deben un gran acto a Sardà. Los periodistas que la tuvieron que entrevistar coinciden en lo mismo: daba miedo. Un temor reverencial por ser quien era añadido a un carácter duro con la prensa. No le gustaban las preguntas mal formuladas, impertinentes o sencillamente las preguntas. Y lo dejaba claro con un taco, una mirada o directamente un sopapo. Todos los exreporteros que rondan los 40 años han sufrido sosteniendo un micro ante la Sardà. Podía negarse a contestar o, raramente, ser amable. Esta es la suerte de que tuvo un jovencito Carles Costa, el presentador del informativo más visto de Catalunya:
Fue la primera actriz que entrevisté. Yo tenía 23 años. Trabajaba en Telecinco. Mi jefa me dijo: "ve con cuidado". La Sardà tenía fama de imprevisible con los periodistas. Era parte de su encanto. Conmigo, fue formidable. Me debí ver asustando... :) DEP ❤️
— Carles Costa Osés, ahora en fase 2 (@carlescosta_) June 11, 2020
TV3
Quién le diría al Carles Costa de 23 años (ahora tiene 45) que entrevistó a la Sardà en Telecinco que veinte años después abriría el TN de TV3 explicando su muerte. Costa pasó miedo con un monstruo del teatro pero la Sardà lo vio tan "asustado" que tuvo piedad. Descanse en paz. Los reporteros también.