Javier Negre es el periodista más duro del Far West. Perdón, del Far Right: la derecha más a la derecha de la extrema derecha. Un talante que demuestra desde hace un año largo en su canal de Youtube, "Estado de Alarma TV". Si hiciéramos caso de sus filípicas, nunca más saldríamos a la calle ni para comprar el pan. Imposible: sólo de pisarlo estaríamos al alcance de monstruos, fieras y peligros horripilantes. Hablamos, claro, de los enemigos de la patria: filoetarras, indepes, comunistas, feminazis y hasta aquellos que prefieren la tortilla de patatas con cebolla. El ejército de las tinieblas no descansa: suerte que tenemos de la existencia de Negre y sus Negreliebers, que se dejan la piel combatiéndolo. La batalla, desgraciadamente, no está saliendo tan bien como desearía. No ha conseguido ni una victoria. Ni siquiera un empate. Sólo colecciona derrotas, ridículos y disparates.

Ahora bien, tiene más moral que el Alcoyano. Porque de tozudez van fuertes. Del resto, sin embargo, están secos. Lo vivimos hace algunas semanas con una entrevista demencial de un reportero a un ciudadano al azar, al que intentaba vender la moto del carácter demoníaco de los indultos a los presos independentistas. Resulta que el hombre no era ningún pardillo, sino un catedrático de Relaciones Internacionales de la Universidad Complutense de Madrid y politólogo, Francisco Aldecoa. Y claro, se comió al ultra con patatas.

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Reportero de Javier Negre metiendo la pata / Twitter

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Javier Negre y el rey Felipe @javier.negre

Ya saben aquella máxima que dice que el hombre es el único animal capaz de tropezar dos veces con la misma piedra. Qué gran verdad. El periodista a sueldo de Negre ha repetido su proeza y ha obtenido el mismo resultado. Sólo una pequeña diferencia: no ha ido a parar a un académico con premios y publicaciones. No hacía falta: el ciudadano madrileño al que quería hacer un "trágala" alabando a Ayuso y exculpándola de la desastrosa gestión en las residencias de personas mayores, es doctor honoris causa en sentido común, sencillez y contundencia.

El hombre, después de oír los argumentos del periodista-opinador y de hacerse cruces, ha acabado hundiéndolo sin piedad, harto de perder su valioso tiempo. "¿Tú no oíste a la Ayuso decir que ella se encargaba de las residencias? ¿No lo has visto en la televisión?". El de Negre intentaba zafarse con un "no" lleno de cinismo. La réplica es colosal: "Joder, pues para ser periodista, ¡bien tonto que eres!". Los internautas buscan la identidad de este señor para hacerle un monumento, una calle y un aeropuerto que lleve su nombre.

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reportero de Javier Negre haciendo el ridículo / Twitter

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Reacciones al sopapo/ Twitter

Haría bien Javier en cambiarle el nombre a su canal de temática facha: más que "Estado de Alarma", tendría que llamarle "Estado de shock".