La imagen durante el partido de semifinales del Mundial de Clubs entre el PSG y el Real Madrid fue esta: la paliza, la humillación, el pim-pam-pum, los 4 goles (y muchos más que le habrían podido caer) del conjunto francés al madridista, que no sabía por dónde le venían, ridiculizado. Los de Xabi Alonso, humillados por los de Luis Enrique, se van para casa con un papel lamentable de Asencio, Rudiger, Vinicius o Mbappé.
Una vez acabado el partido, sin embargo, la imagen fue esta:
Pasaban unos minutos de la medianoche cuando un espontáneo irrumpía en una conexión de Edu Aguirre, enviado especial en los Estados Unidos, para El Chiringuito. El hombre, enviándole saludos a Cristóbal Soria, mientras el reportero, irado, lo empujaba y maldecía, menospreciándolo y diciendo que "Es un gracioso. Aquí acreditan a cualquiera". Pero este cualquiera tiene nombre y apellido y no es uno cualquiera. Se trata de Julián Gil. Es un reconocido actor argentino, que también ha hecho de modelo y que es un exitoso empresario en Miami, que ha participado en numerosas series y películas en su país o en otros países sudamericanos (Eva Luna, El maleficio, La herencia y tantas otras), que tiene tres hijos y que el pasado 29 de diciembre, después de diferentes relaciones, se casó con la famosa presentadora y periodista mexicana Valeria Marín.
Justamente con otro periodista, el ex jugador del Barça, Marc Crosas, ha hecho una gran amistad y han ido a ver partidos juntos de su Barça querido. Porque Gil es muy y muy culé y a la mínima que ha tenido ocasión, ha saludado a los jugadores y a Hansi Flick después de alguno de los títulos conseguidos esta temporada. Gil, camiseta blaugrana de sus amores, o también la del PSG, probablemente de cuándo Messi fue a jugar allí, pasión que ha mantenido hasta ahora. Un Julián Gil feliz y radiante cuando ha podido estar al lado de sus ídolos del Barça:
El intérprete, además, ha demostrado ser un tipo elegante al escribir estas palabras después de su intervención: “Querido Edu Aguirre, perdona, pero el fan del fútbol pudo más que yo. Jajaja... Tenía que mandarle cariños al tío Cristóbal Soria, leyenda y gran conocedor del fútbol y a mi amigo Josep Pedredol. Si te quedas a la final, te busco para darte un abrazo como se merece un ‘crack’ de ‘El Chiringuito de Jugones’ o puedes vernos en ‘La Jugada’. ¡El fútbol se vive, se grita… y se agradece, hermano!”. Gil, por cierto, ha revelado hace unos meses que se encuentra en alerta constante desde que hace dos años le diagnosticaron un segundo cáncer de piel. Un Julián Gil que después de su irrupción en El Chiringuito, poniendo de los nervios a Edu Aguirre, se ha ganado todavía un poco más los corazones de los aficionados blaugranas. Follow desde ya.