Joana Sanz sigue casada con Dani Alves, apoyándole después de cumplir condena como agresor sexual de una joven catalana en los lavabos del reservado del Sutton. El tribunal no acabó de creerse toda la versión de la víctima y condenó al exfutbolista del Barça a una pena menor que con los meses que Alves se ha pasado en prisión provisional lo han dejado libre pronto. Pero con el compromiso de no marcharse al Brasil, donde no hay tratado de extradición con España. Alves vive con su mujer, que lo ha perdonado, en la mansión que tiene el culé en Esplugues. Un jardín frondoso donde anidan los murciélagos. Joana Sanz, modelo canaria, ha acogido uno que se ha perdido y lo ha alimentado con agua y leche hasta que no ha podido más y ha enviado un mail a un Centro de Acogida de animales de la Generalitat, el de Torreferrussa en Santa Perpètua de la Mogoda.


Sanz hace un vídeo explicando: "Yo sabía que tenía una comunidad de murciélagos en mi casa, porque se meten por las baldosas. Éste habrá caído, y decidí cogerlo porque si lo dejaba en el suelo con el sol del mediodía, se quedaría disecado. No sabía qué hacer con él, en las películas chupan la sangre. Allí está, en la caja. Compré leche de gatos, que leí en Google que es lo que le podía dar. Ahora está barriga por arriba, muy tranquilo. Envié un email a Torreferrussa, que se supone que se encargan, pero de momento me toca a mí hacer de madre murciélago".

Joana Sanz es amante de los animales, se encuentra el animalillo en el jardín y lo cuida, lo alimenta con una pequeña jeringa, le da de beber, hace bromas sobre que chupa la sangre y pone la banda sonora de Batman, la buena, la de la serie de los 60 emitida por TV3, que es icónica, paródica y popera. Hasta aquí todo muy bien. Pero Joana Sanz hace, correctamente, lo que hay que hacer, enviar un mail a Torreferrussa, que le contestan en catalán y ella, después de 7 años viviendo en Catalunya (se casó con Alves en el 2017) se hace la indignada, o la sorprendida, y cuelga un story de Instagram que después ha borrado porque se ha dado cuenta del ridículo: La Generalitat responde en catalán a una persona que hace 7 años que vive en Catalunya y que entiende perfectamente el catalán. ¿Por qué hay que incendiar la catalanofobia en redes poniendo un post así? "Escribo en castellano y me contestan en catalán. Opinen ustedes..."

Opinen ustedes es una invitación a la catalanofobia para que insulten al país y los catalanohablantes diciendo que se tiene que contestar en la lengua común que une a todos los españoles y bla bla bla. Joana Sanz, con buen criterio, ha eliminado este Instagram pero la primera reacción queda clara: hacerse la ofendida porque un centro de acogida de animales público no le responda en castellano. Siete años en Catalunya, canaria pero una catalana más. Y estamos así. Joana Sanz tiene un criterio cuestionable. Eso ya se sabía.