La cantante, influencer y personaje Mediaset, La Pelopony, quiere matarnos de un susto. La catalana decidió operarse en Turquía hace pocas semanas, quería una cara nueva. Un completo, completo. Salió de quirófano hecho una auténtica chapuza, con secuelas angustiantes para ella e impactantes para sus seguidores. La inflamación era tan bestia que no podía abrir los ojos, sufría problemas respiratorios por el efecto de la anestesia, y el dolor era tan intenso que suplicaba morfina al cirujano otomano, sin demasiado éxito. La cara era un cromo, superando los límites de la palabra escalofriante con creces. Nadie sale presentable después de una intervención como esta. Pero su estado era deplorable. El físico y el anímico.

Hay que decir, sin embargo, que Yolanda no está contenta con el revuelo mediático que ha armado con sus publicaciones. Que no está desfigurada, que cómo decimos eso. De acuerdo, es su opinión. Y la respetamos. Pero el resto del mundo tiene otra, le guste o no. También muchos de sus fans más fieles, que alucinaban con el relato pleno de llantos, gemidos y lamentos que firmaba justo después de recuperar la vista y su autonomía. Y, por lo que acabamos de ver en las redes sociales de la polémica protagonista, todavía fliparán más. Cada capítulo es más heavy que el anterior.

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La Pelopony / Instagram

Visto el éxito mediático conseguido, Mediaset se suma a la fiesta publicando la retirada de puntos y, más o menos, unpackaging de la Pelopony 2.0. Sinceramente, da incluso más cosita que la versión Walking Dead desde Turquía. Especialmente porque las cicatrices, los moratones y la aparatosidad continúan, pero ella está más animada y suelta unas juicios que te dejan de piedra. "Es una puta fantasía", afirma tras retirarle la sutura de los párpados, consecuencia de la blefaroplastia. Una de las 7 cosas que se ha tuneado, reformado o como le quieran llamar. Lo que más le gusta es la nariz nueva, la ve de un recto imponente que ni las columnas de un templo. Así la tiene: con los agujeros asimétricos y de diferentes tamaños.

La Pelopony operación Instagram
La Pelopony / Instagram
La Pelopony operación 2 Instagram
La Pelopony / Instagram

"Ahora me veo como una tía de 26 años", explica a cámara una de 37 a la que le ha pasado el Talgo de las 11:42 por encima. Podría ser que tuviera superpoderes y fuera capaz de ver el futuro; de momento el presente es de careta y paracetamol. "Cariño, mira qué cirujano en Turquía", acaba diciendo de manera burlona. Es un caso, sí. La Pelopony is back. Todavía, eso sí, se podría cumplir la profecía que lanzó en sus horas más bajas, llorando desconsolada: "Si me queda bien habrá valido la pena, y si no soy una gilipollas. No me hacía falta, yo ya estaba bien". Pues eso.

La Pelopony antas de operarse Instagram
La Pelopony antes de operarse / Instagram