Este miércoles TV3 ha perdido a una de las personas con las que más espectadores se troncharon de risa en los inicios de la televisión catalana. Porque ha muerto a los 86 años el gran actor y humorista Santi Sans.
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Los espectadores catalanes disfrutaron de su humor, su espontaneidad y su bondad especialmente en la década de los años 80, con programas tan emblemáticos como Tres i l'astròleg o Filiprim. Su socarronería hacía las delicias del público y era un regalo para los presentadores contar con él en estos programas. Hacía de todo y lo hacía con mucha gracia, como esta imitación de Tina Turner en el Filiprim:
Él fue uno de los primeros imitadores televisivos del país, un cómico de aquellos de raza, pero era mucho más que eso. También era capaz de dejar ver su inmenso talento haciendo de actor en otros registros más dramáticos, como cuándo participó en la serie Laberint d'ombres o en obras teatrales como L'hort dels cirerers en el Teatre Lliure o Solness, el constructor en el TNC. Lo que era indudable es que era un animal escénico forjado a base de actuar ante públicos de todo el país, en escenarios de todo tipo, tratando de cerca a artistas como Antonio Machín, la Bella Dorita, Sara Montiel, Cassen, José Guardiola o Mary Santpere y siempre con una sonrisa.
Seguro que el bueno de Sans, allí donde esté, ahora se reencontrará con los también añorados Josep Mª Bachs, Jordi Estadella, Llàtzer Escarceller ('l'avi'), Jaume Sorribas ('el senyor encarregat') o el Perich e improvisarán un Filiprim de aquellos que todos añoramos, donde reine el buen humor. Descanse en paz.