Álvaro Morata y Alice Campello viven una etapa intensa. Tras reconciliarse en enero de 2025, la pareja ha vuelto a estabilizar su vida familiar. Cinco meses después de anunciar su ruptura, decidieron retomar la convivencia y reorganizar su rutina. Ahora viven en Italia con sus cuatro hijos: Leonardo, Alessandro, Edoardo y Bella.
Su relación, marcada por cambios constantes, combina deportes, negocios y vida familiar. Morata ha cambiado de club varias veces en los últimos meses, primero al Galatasaray y ahora al Como 1907. Alice, lejos de quedarse atrás, acompaña al delantero en cada traslado. La familia mantiene también frecuentes viajes a Madrid, donde están sus propiedades y algunos de sus negocios.
El negocio más allá del matrimonio
El matrimonio ha consolidado un imperio empresarial en cuatro compañías. Dos de ellas se dedican a la gestión de artistas. La primera, Tamora 2011 SL, nació en 2012. Morata es administrador solidario, y Alice ocupa el mismo cargo desde 2023. Su actividad abarca servicios artísticos, musicales, literarios y periodísticos.
La segunda, Liferners Partners Agency, fundada en 2020, gestiona la imagen de artistas y deportistas, su merchandising y derechos audiovisuales. La pareja también ejerce como administradores solidarios, un rol que comparten desde el inicio.
Además, la pareja ha invertido en el sector inmobiliario. En 2019 surgió Tamora Housing Investments, centrada en la adquisición, promoción y gestión de inmuebles. Desde 2023, Morata y Campello son administradores solidarios. La segunda inmobiliaria, Morata Campello Real Estate, se constituyó el 1 de septiembre de 2025. La empresa se ocupa de comprar, vender y arrendar propiedades, gestionando riesgos propios y la administración de bienes.
Comparten dos empresas y un patrimonio millonario
Más allá de los negocios, la pareja ha sabido manejar su vida pública. Sus redes sociales reflejan una relación estable, con viajes y mensajes de cariño que refuerzan su imagen de unidad familiar. Sin embargo, los seguidores siguen atentos a cada movimiento en sus perfiles, recordando que la pareja ya atravesó una ruptura en agosto de 2024.
La familia combina la vida nómada con estabilidad económica. Los negocios de Morata y Campello no solo generan ingresos millonarios, sino que también consolidan su patrimonio. La gestión conjunta de las empresas demuestra una estrategia sólida: equilibrio entre arte, deporte e inversión inmobiliaria.
Hoy, Morata y Campello representan un modelo de pareja que equilibra carrera profesional, familia numerosa y un imperio empresarial compartido. Sus decisiones financieras y personales muestran que, pese a los cambios y mudanzas, su colaboración y complicidad siguen siendo la base de su éxito.