Miquel Montoro ha dicho basta. Después de un montón de días soportando una avalancha de críticas y un sinfín de insultos, de aguantar españolistas que le exigen que hable castellano y catalanohablantes que le piden que siga haciendo vídeos en catalán, el youtuber mallorquín ha salido al paso de la polémica y ha querido dejar las cosas claras.

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Controversia que tiene el origen en una decisión del mismo Montoro: pasarse al castellano y dar el salto a un público potencialmente mucho mayor. Más allá de su elección lingüística, los que lo atacan pierden de vista que el joven influencer es un menor de edad que acaba de cumplir 14 años. Sólo un niño que ahora se ve obligado a defenderse. Y lo hace con contundencia, pidiendo comprensión y acusando de mentirosos a los que lo señalan.

Nunca ha decidido abandonar un idioma y aferrarse exclusivamente al otro, asegura. Sino que pretende hablarlos los dos, que por algo es bilingüe. "Dejad de inventar y mentir, y sobre todo dejad de creer a los mentirosos. Si alguien quiere saber algo de mi, ¡que pregunte!". Nada mejor que ir a la fuente original para conocer, de primera mano, lo que opina.