Mayka Navarro es una de las caras más populares de la TV. Sobre todo por dos razones: porque la materia que toca, la crónica negra, los sucesos, la crónica judicial son mucho populares y porque su estilo, desenvuelto, próximo y directo, es inusual al gremio. Eso ha hecho que triunfe, siendo uno de los fichajes estelares de La Vanguardia, que la arrebató a El Periódico, o que sea una cara habitual de TV3, a programas como Tot es mou, o sobre todo a Telecinco en los programas de Unicorn, la productora de Ana Rosa Quintana donde es la corresponsal en Catalunya para todo tipo de asuntos, incluso para el procés. Este domingo ha ido al programa de Catalunya Radio donde colabora, El suplement, pero como testimonio VIP de La Marató. Ella sufrió problemas de salud sexual y reproductiva derivados de su vocación tardía para ser madre que derivaron en problemas de salud mental. Su testimonio es especialmente conmovedor.
Mayka Navarro habla antes de la menopausia aprovechando lo que cuenta su compañera Laura Fa. Navarro: "Tengo 55 años. En julio haré 56. Hace 10 años que tengo la menopausia, dormía mal, sudaba por todo el cuerpo y por la cabeza. Y sobre todo la libido cayó, y los hombres desaparecieron de mi vida. No tenía deseo sexual, me sentía invisible. Tenía sequedad vaginal, podía utilizar lubricantes pero hacía daño. De repente decías 'Cuánto tiempo hace que no te tocas o que no piensas ir a la cama con alguien?'. Yo soy una mujer muy sexualizada, me gusta mucho el sexo y de repente desapareció el deseo. Mi ginecólogo me envió al psiquiatra".
Mayka: "Hice un tratamiento hormonal no cubierto por la Seguridad Social, el SottoPelle, el chip sexual (No está avalado por las sociedades científicas). Cada 6 meses una analítica para ver los estrógenos y una sustitución, me inyectaban como un grano de arroz en el culo, una capsulita, mi cuerpo lo va cogiendo a medida que lo necesita. Cuando lo empiezo mi cuerpo ya nota que va bajo de estrógenos. Cuando me hormoné mi madre pensaba que me daría cáncer. Mi madre tiene 4 hijos y yo quise ser madre tarde. Prioricé el trabajo y nunca era el momento. Era de las pocas cosas que yo pensaba que sería, madre y muy buena madre de muchos hijos pero mi cuerpo me dijo que había llegado tarde. En una clínica de fertilidad sumé tratamientos demasiado seguido demasiado sola durante cuatro años, estaba sobrehormonada. Fue todo un fracaso, no estaba preparada ni física ni mentalmente y el fracaso me llevó a un pozo del cual todavía estoy en tratamiento psiquiátrico. Me cuesta hablarlo".
La periodista @maykanavarro pasó por muchos tratamientos de reproducción asistida, con muchas consecuencias físicas y, sobre todo, emocionales.
— La Marató de 3Cat (@la_marato) December 17, 2023
Haz un donativo a #LaMarato3Cat
📞 900 21 50 50
���� Bizum 33 333#LaMaratóQueDonaLlum ���� pic.twitter.com/Qv4N9B4LJ6
Mayka Navarro tenía 42 años cuando quiso ser madre, con fecundación in vitro, banco de semen, los propios óvulos, con una donante de óvulos (dos intentonas con la misma) pero cuando se los implantaban a Mayka no triunfaban... "Cada vez que fallaba me sentía culpable que si me había movido mucho, que si había trabajado mucho... Llegué a mear en palangana para no moverme mucho. Un malestar que me llevó a la mesa del psiquiatra donde sigo haciendo terapia. Nadie me advirtió de las consecuencias de la hormonación y del fracaso. Y en el aspecto económico, me arruiné literalmente". El coste brutal, físico, mental y económico de querer ser madre sola y tarde. Valiente, generosa e impresionante Mayka Navarro.