‘Joc de cartes’ regresó el pasado miércoles a la parrilla de TV3. El programa más visto de la televisión catalana estrenó su sexta temporada y lo hizo con importantes cambios. Esta nueva edición cuenta con trece entregas, sin embargo, la que se emitió esta semana no corresponde a la primera entrega grabada. Los espectadores del concurso de cocina presenciaron un espectáculo inigualable, donde la tensión estuvo presente en todo momento. No se recuerda un programa igual, solo en la edición verano de este año unos concursantes no llegaron a presentarse en la confrontación después de haber hecho el ridículo en su propio restaurante. Vendieron humo con la comida, pero en esta ocasión un concursante ha engañado al programa.

El espacio presentado por Marc Ribas cuenta todas las semanas con cuatro chefs de cuatro restaurantes diferentes, agrupados por una modalidad. Igual que sucede en programas como ‘MasterChef’, donde se obliga que los concursantes anónimos no tengan ningún título ni experiencia como cocineros, en ‘Joc de Cartes’ se pide que todos los participantes sean chefs. En este primer programa uno de los cuatro a roto la norma.

Joc de cartes
Joc de cartes

La primera misión de la nueva temporada de ‘Joc de cartes’ fue encontrar al mejor chef joven del Vallès Occidental. Para ello contaron con la presencia de los chefs de los restaurantes Can Mauri, El Cargol Daurat, Kisamba i Can Sidro, ubicados entre Polinyà, Terrassa i Palau-solità i Plegamans.

El primer reto para los cocineros se descubrió en el restaurante Can Mauri, donde Álex Ruano tuvo que encontrar la fórmula de ofrecer un menú completo para Víctor Pajares, cocinero de ‘El Cargol Daurat’, debido a sus alergias e intolerancias alimentarias, una de ellas la lactosa. A los cocineros les complicó la vida en los postres.

Álex Ruano es quien mejor satisfacción produjo a Víctor y al resto de comensales, incluso a Marc Ribas, quien premió uno de los platos del restaurante. El resto tuvieron tiempo suficiente para adaptar la carta a las alergias de su compañero, pero tanto Cristina como Sergio fallaron en su cometido.

Sergio Cobadela engaña a 'Joc de cartes' 

Sergio Cobadela, quien se describió como un cocinero sin formación, pero con mucha convicción y ambición, atacó a todos sus compañeros. Nada le pareció correcto. Sus caras eran un auténtico poema. El auténtico protagonista del capítulo. Su actitud provocó que sus compañeros estuviesen con mil ojos en Can Sidro. A pesar de criticar zonas como el espacio, la peor parte de la llevo la comida, y no precisamente porque estuviese mal hecha, a Marc le encantaron los pies de cerdo a la brasa, pero no estaban hecho por el supuesto chef.

Álex Ruano puso su nombre en Google y apareció Sergio Cobadela como relaciones públicas y wedding planner. En ningún momento cocina, y es que si no fuese por el equipo de Can Sidro no sacaría adelante ningún plato. Su profesión es otra bien distinta y engañó al programa para participar. Quiso dar la cara por el restaurante para promocionarse. Sin embargo, su imagen quedó totalmente dañada.

Sergio estuvo a punto de provocar una intoxicación alimentaria en Víctor. Y no precisamente por el pastel que el comensal no se quiso comer por miedo, sino por un magret de pato que estaba cocinado con la cocción de la ternera. Fallo más que suficiente para suspender al restaurante en la comida. Y lo hizo Víctor, el afectado, y Álex, ambos le pusieron un cero. Nunca se había puesto esa nota en un programa.

Ya en la mesa de confrontación, cuando Sergio destapó su campana y vio el suspenso, Marc Ribas destapó toda la verdad. Le preguntó sinceramente si él era cocinero, y se quedó mudo. “Este no es cocinero. Sergio es una estafa”, dijo Álex muy enfadado. Momento en que el presentador le preguntó: “¿Tu trabajo en Can Sidro es jefe de cocina o es otro?”. “Es todo”, contestó Sergio sin dudar. “Ole tus huevos”, espetó Álex. “Eres mi ídolo, y encima estás en la cocina sin delantal, sin trapo y sin mancharte, si haces el papel, hazlo bien”, le comenta su compañero. “El trabajo de un jefe de cocina no es pelar patatas todo el día, sino hacer que sus trabajadores se sientan a gusto, supervisar y que todo salga perfecto”, se defiende.

“Nos has engañado al programa de ‘Joc de cartes’ y tú no eres cocinero”, le recrimina seriamente Marc Ribas con una mirada desafiante. Ya no quiso seguir con el tema.