Aunque han pasado años desde la muerte de Diego Armando Maradona, su figura continúa generando titulares. El astro argentino no solo fue célebre por su talento en el campo, sino también por los numerosos episodios que marcaron su vida fuera de él. Uno de los más curiosos y menos conocidos es su intento de visitar a Isabel Pantoja durante el tiempo en que la cantante se encontraba cumpliendo condena en prisión.
Este episodio, que fue recuperado en televisión años después, remonta al año 2017, cuando Isabel Pantoja se encontraba en el centro penitenciario de Alcalá de Guadaíra cumpliendo una pena por blanqueo de capitales. Según reveló entonces la periodista María Patiño en el programa 'Sálvame', Maradona habría solicitado un encuentro privado, o “vis a vis”, con la tonadillera. Sin embargo, dicha petición fue rechazada por las autoridades penitenciarias.

La admiración de Maradona por Isabel Pantoja viene de su paso por el Barça
La relación entre Maradona y el entorno de Pantoja tiene raíces profundas. A principios de los años 80, cuando el futbolista llegó a Barcelona para fichar por el Fútbol Club Barcelona, entabló amistad con el torero Francisco Rivera ‘Paquirri’, entonces marido de la cantante. A través de esta conexión, Maradona conoció y simpatizó con Isabel Pantoja, con quien mantuvo una amistad cordial durante años.
Tras el fallecimiento de Paquirri en 1984, la admiración de Maradona hacia la Pantoja no disminuyó. De hecho, con el paso del tiempo, se convirtió en un ferviente admirador de su música. Según comentan personas cercanas a su entorno, el exfutbolista escuchaba frecuentemente canciones de la artista, e incluso utilizaba algunos de sus temas como banda sonora para sus entrenamientos personales.
Entonaba sus canciones al volante
Uno de los momentos más comentados fue cuando, en una historia de Instagram, se lo pudo ver dentro de un coche cantando a viva voz “Era mi vida él”, una canción emblemática que José Luis Perales compuso especialmente para Pantoja como homenaje a su difunto esposo. Maradona no solo conocía la canción, sino que la interpretaba con pasión, dejando clara su devoción por la tonadillera.
Kiko Rivera, hijo de Isabel, fue quien dio visibilidad a esta faceta del exjugador al compartir en redes sociales en 2018 que Maradona había sido un “seguidor fiel” de su madre. El gesto sorprendió a muchos, pero también evidenció la profundidad del respeto que el futbolista sentía por la cantante sevillana.
