Ciudadanos, game over, la partida ha acabado. Hay algo poético que el último en cerrar la puerta sea un tal Jordi Cañas, de los fieles escuderos de Albert Rivera, furibundo anti-indepe de maneras extremas y burdas hasta el final. Se podría haber marchado a su casa, donde lo han enviado los ciudadanos que decía que quería representar, con dignidad pero lo hace insultando y bramando. Se hace extraño que un eurodiputado empaquete en cajas sus pertenencias al Europarlamento y grite en twitter contra los catalanes con insultos de "LAZIS", el viejo sonsonete facha para llamar nazis a los catalanes que pedían la libertad de los presos políticos con un lazo amarillo en la solapa. Cañas cuelga las cajas de cartón, fin a toda una vida en política, excepto el intervalo donde dimitió por las sospechas de delitos económicos, e insulta:

Cañas dobla|termina, EFE
Cajas Cañas tw

Cañas está muy afectado no tanto por su derrota, que todas las encuestas preveían, sino por la desintegración de todo lo que él representa: Ciutadans ha muerto, Rivera y Arimadas abandonaron el barco hace tiempo a medio naufragio y los restos del desastre no tienen trabajo: Carlos Carrizosa, Javier Nart o el mismo Cañas, que quizás aspira a volver, de tertuliano a TV3 a los programas de Helena Garcia Melero. Costará justificar el retorno de alguien que se dedica a insultar así:

Jordi Cañas TV3

Jordi Cañas no solo insulta a tuiteros anónimos sino que ha sacado la máquina de vomitar insultos contra un famoso tertuliano y productor de TV3, Antoni Bassas, por haber escrito un artículo titular "Se respira mejor" en el diario Ara sobre la desaparición de C's. Cañas está fuera de sí, faltón y maleducado. Le escupe a Bassas "pus ética, tufo de colonia barata supremacista y palurda, que busca camuflar el insoportable olor a mierda xenófoba que despide":

Antoni Bassas - Sergi Alcàzar

Es intolerable que alguien que ha sido representante público del pueblo de Catalunya escupa de esta manera con insultos y espuma por la boca. Si Cañas no entiende por qué las personas decentes celebran su final político, que relea su tuit y lo entenderá.