Isa Pantoja está a días de convertirse en madre por segunda vez. La llegada de su primer hijo en común con Asraf Beno está programada para este miércoles 18 de junio, y todo parece listo en casa… menos una cosa: la presencia de su madre. Isabel Pantoja no ha mostrado el más mínimo interés por el nacimiento de su nieto, marcando así una grieta familiar que ya parece imposible de reparar.
Mientras la influencer prepara las mochilas del hospital y se dedica a caminar diariamente para facilitar el parto, la tonadillera ha optado por el más absoluto silencio. No hay llamadas, no hay mensajes, no hay gestos de cariño. Lo que debería ser una celebración íntima y familiar, se ha convertido en una nueva evidencia del frío cortante que domina la relación madre e hija. El distanciamiento, que ya era evidente desde hace años, ha alcanzado un nuevo y doloroso nivel.
Isabel Pantoja se borra del mapa en el momento más esperado de su hija
Ni Cantora, ni Madrid. Isabel Pantoja se ha convertido en un enigma itinerante. Tras haber tomado la decisión de abandonar su fallido refugio de lujo en la capital, ha decidido cortar amarras no solo con sus hijos, sino también con el país que la vio brillar. El destino elegido podría ser República Dominicana, donde planea instalarse para gestionar su última gira internacional. Una huida en toda regla, emocional y física, que coincide sospechosamente con la inminente llegada de su nuevo nieto.
Fuentes cercanas afirman que Pantoja no tiene intención alguna de asistir al parto ni de conocer al bebé en un futuro cercano. El mensaje es claro: no hay lugar para reconciliaciones. La artista prefiere refugiarse en sus proyectos profesionales y en su círculo más reducido, encabezado por su hermano Agustín, antes que hacer frente a las tensiones familiares que arrastra desde hace décadas.
Un nuevo bebé, un trabajo en peligro y una madre ausente: el cóctel explosivo de Isa Pantoja
A la incertidumbre emocional se le suma ahora la económica. Isa Pantoja se enfrenta a la posible cancelación del programa “La familia de la tele”, su actual fuente laboral. Tras abandonar Telecinco en un movimiento arriesgado, la colaboradora apostó por el nuevo formato de RTVE, que no ha logrado los resultados esperados. La audiencia no ha acompañado y los rumores sobre su cancelación son cada vez más fuertes.
En este escenario, su rol como influencer cobra aún más peso, ya que su perfil en redes sociales —con casi 800.000 seguidores— se convierte en su salvavidas profesional. Marcas de maternidad y productos infantiles ya empiezan a acercarse, sabiendo que Isa Pantoja se convierte, una vez más, en protagonista de la actualidad rosa… aunque sea por las razones más amargas.
Respecto a Isabel, lo más preocupante no es solo la ausencia física de la cantante, sino su total indiferencia ante el nacimiento de un nuevo miembro del clan. Ni un mensaje público de apoyo, ni una muestra de alegría. Todo indica que la cantante ha cerrado definitivamente la puerta a cualquier vínculo emocional con su hija menor. Y lo hace en uno de los momentos más vulnerables para Isa: en pleno embarazo, con un futuro incierto y un hijo a punto de nacer. En la historia de los Pantoja, las traiciones, distancias y desencuentros ya se han vuelto parte del ADN familiar. Pero esta vez, el silencio de Isabel resuena más fuerte que cualquier grito.