Marc Calderó se está forjando, día a día, una sólida carrera en televisión. El periodista y presentador catalán lleva mucho tiempo demostrando su talento ante cámaras, su profesionalidad y rigor y su respeto por los compañeros y por la audiencia. Educado, buena gente y un trabajador incansable, dedica horas y horas a hacer lo que más le gusta: comunicar. Y lo hace muy bien. Pero más allá de su trabajo, Marc siempre tiene muy presente que aparte de periodista, es persona. Una persona que, como todos, se emociona cuando alguna noticia a su alrededor lo conmueve. Y da igual que esté en un plató de televisión. No piensa dejar de ser nunca como es. No piensa dejar de emocionarse cuándo y dónde sea, por el motivo que sea, si así le sale de dentro. Solo faltaría. Pero se ve que a algunos imbéciles eso los molesta. Pues dos piedras. Pero vayamos por partes.

El presentador catalán dejó hace unos meses Telecinco y aterrizó en TVE, para hablar a la audiencia cada día de lunes a viernes a las once y media en el programa Hablando claro. Y allí, ha hablado claro. O más bien, ha llorado claro. Y es que a pesar de que nos pensemos que los periodistas tienen que mantener el tipo y que no les afecte nada de lo que están explicando, no es así. Y Marc se ha emocionado en directo cuando estaban abordando una noticia importante en su programa.

Una de las noticias de las últimas horas ha sido la joven de 14 años, Vicky, que había desaparecido en Albacete desde hacía cinco días. Finalmente informaban de que la habían localizado en Segovia, con un hombre de 30 años que ya ha sido detenido por la policía, y el programa de Calderó hablaba con la madre de la niña. En pantalla partida, la reportera cubriendo la noticia y los dos presentadores, Marc Calderó y Lourdes Maldonado. Y él, que se emociona y le saltan las lágrimas mientras su compañera se dirige a los espectadores. Calderó, tocándose los ojos, conmovido: "Nos gusta dar buenas noticias". Y tanto que sí... Pero se ve que a algunos impresentables eso no ha gustado. Ver a un hombre derrumbarse y llorar ha hecho aflorar sus instintos más primarios de machirulos repugnantes y han empezado a insultar a Calderó con palabras homófobas y machistas. Cosa que él ha denunciado públicamente: "'Nenaza', 'Llorica', 'Blandito'… Alucinado con algunos mensajes que estoy recibiendo por emocionarme en directo. ¡Seguiremos emocionándonos cada vez que demos una buena noticia!". Y tanto que sí. Maldonado le ha dado su apoyo, así como decenas de colegas y espectadores ante estos miserables comentarios:

Marc Calderó, maravilloso. Que llore cuando le apetezca. Y a los matados que le insultan, ni caso. Esta gentuza no nos provocan ni lágrimas, ni pena. Más bien asco.