Para convertirse en influencer, no hay que tener demasiada formación académica, triunfar en la red es cuestión de carisma y constancia. Dentro del gremio hay creadores de todo tipo, hay quienes elaboran vídeos y contenido favorable, potenciando sus pasiones y entreteniendo al público. Otros, en cambio, se convierten en un ídolo de masas por tan solo hacer cuatro pasos de bailes. Esta es la gran suerte de muchos jóvenes, ganan millones sin sudar mucho. La magnitud de su repercusión es grandiosa, y aunque mucha gente les odie, triunfan gracias a nosotros, sí, los usuarios que les cotilleamos día a día. Eso sí, reciben la misma cantidad de dinero que críticas, sin embargo, hay que remarcar que a veces son bien merecidas.

El mundo de TikTok ha hecho saltar a la fama muchas jóvenes, entre las más seguidas, todo el mundo conoce a Lola Lolita o, a la catalana Mar Lucas, que cuenta con quince millones de seguidores, mundialmente conocida por la plataforma. De Sitges, tiene tan solo veintiún años, pero si le echas un vistazo a su perfil parece imposible que haya tenido tiempo de vivir tantas experiencias. Ha viajado a Latinoamérica, a los Estados Unidos, campañas publicitarías, festivales... incluso ha dado el salto al panorama musical. No hay joven que no la conozca. Bien, ella cuenta con miles y miles de seguidores, pero dentro de la prensa rosa es más conocida por sus pifias virales. Por muestra, su comentario con Marta Díaz, compañera y amiga de oficio que se rompía esquiando el ligamento cruzado y Mar Lucas se refería a la lesión de la siguiente manera: "No me lo creo, el ligamento es el peor hueso" ¿Os podéis imaginar la magnitud del ridículo verdad?

Pues bien, esta vez ha vuelto a patinar con una nueva denominación, esta vez no tiene nada que ver con la anatomía del cuerpo humano. Como bien os describíamos al inicio, la mayoría de estas chicas viajan constantemente, y lo hacen tan a menudo que ni siquiera conocen su destino. Lo importante es hacerse la foto en el sitio ideal, para publicarlo, este es su negocio -totalmente lícito. Ayer la red recopilaba un clip de la joven durante uno de los sus directos de Instagram. Mientras cenaba, iba respondiendo las dudas de sus seguidores, entre los cuales uno de los usuarios le preguntaba por si había visitado Corea del Norte. Asintiendo ilusionada, Mar Lucas afirmaba que le había encantado. Pero su respuesta hacía poner las manos en la cabeza de los espectadores. Seguramente la joven no debe diferenciar los dos estados asiáticos, ni las ideologías de cada uno de ellos. Hemos revisado todo su historial de viajes y efectivamente, ha patinado del todo.

Hace casi un año, durante el mes de marzo, Mar Lucas viajaba a Seúl, la capital de Corea del Sur, con la marca de cosmética coreana Yepoda. La confusión es más que evidente, y la red, que pronto recogía el clip, ni se molestaba a debatir si la joven había ido o no en Corea del Norte, la había cagado de pleno. Quizás no diferencia los dos estados o peor todavía, quizás ni conoce la situación de cada uno de ellos. "La inteligencia la persigue, pero ella es más rapida" aseguran algunos internautas. Seamos sinceros, ir a Corea del Norte no es imposible, pero si fuera el caso que hubiera visitado el estado asiático, os aseguramos que habría dejado rastro por su perfil... y no es el caso.

Para ellos el precio de su fama es recibir críticas, para la sociedad, el precio de verlos triunfar es ponernos las manos en la cabeza con todos sus patinazos.