Eduard Fernández es uno de los nombres más importantes del mundo de la interpretación, y así lo ha demostrado este último año después de sus papeles en películas muy premiadas como El 47 y Marco. Su trabajo interpretativo se premió en muchas galas del cine español, y en una de ellas, la noche de los Goya, le entregó el premio a Mejor Actor Protagonista su hija Greta Fernández, la niña de sus ojos que justamente es actriz gracias a su padre y la pasión que siente por su profesión. Ahora, su única hija, ha ido construyendo una gran trayectoria como actriz en diferentes proyectos y películas, y está a punto de volar hasta Alemania, donde empezará el rodaje en alemán de un nuevo proyecto donde, de nuevo, la veremos brillar. Antes, sin embargo, ha pasado por el plató de La Turra, el pódcast de 3Cat presentado por Alba Riera, amiga suya, con quien ha hablado de la relación con su padre como nunca antes lo había hecho.
El nuevo capítulo de La Turra iba dedicado a las relaciones entre padres e hijas, y los llamados daddy issues que mucha gente ha sufrido a raíz de su vínculo paternal. La invitada final de este programa, era Greta Fernández, para muchos una nepobabie, conocida por algunos como "la hija de..." una etiqueta que la actriz menciona durante la entrevista y que, como en todos los trabajos, tiene privilegios y complejos. Greta Fernández habla abiertamente de la figura de su padre, el encargado de hacerla tocar de pies en el suelo en muchas ocasiones, ha narrado que el mejor consejo que le ha dado a su padre es que "nada es tan importante" En la conversación entre amigas desde el sofá del programa, Alba Riera, le pregunta por una de las entrevistas que más ha marcado la carrera de su padre, cuando explicó abiertamente su adicción en el alcohol.
Unas declaraciones de Eduard Fernández que tuvieron muchísima repercusión, y que, Greta Fernández, vivió así detrás de cámaras: "Esta entrevista fue al día siguiente de los Goya, que era un día emocional, porque los Goya fue muy bonito, yo le entregué el premio a mi padre. Yo era muy consciente de que al día siguiente salía esta entrevista, y de hecho, de esta entrevista hemos hablado mucho mi padre y yo, y me ha pedido permiso, muchas veces, con Jordi también hemos hablado y ha sido muy bonito, y me he sentido muy parte de todo esto. Me ha parecido muy valiente que lo explique, tampoco fue un momento fácil para mí que no lo explicara, porque fue una época que tanto él como yo estábamos nominados a los Goya y a muchos premios, y no se podía decir dónde estaba mi padre. No podía asistir a las galas, y fueron unas nominaciones... Primera nominación de los Goya para mí, un poco amarga, fue una época complicada, lo pasé muy mal, tuve mucha exposición, fue el momento de más exposición a mi carrera, entonces no fue fácil" confesaba la actriz con las lágrimas en los ojos. Aquí el fragmento completo de la conversación sobre su padre:
Eduard Fernández le preguntó a su hija en varias ocasiones si le parecía bien que hablara de su adicción públicamente, pero Greta nunca lo dudó: "Enseguida lo tengo claro. Me lo pregunta tantas veces porque le da miedo que me haga daño, yo no creo que le diera miedo, que la gente hablas de eso, porque yo al final con la gente más próxima hablo mucho de lo que me pasa, y eso ha sido una cosa muy importante de mi vida y toda mi gente lo sabía de hacía mucho tiempo. No me daba miedo el que pensara la gente, sí que es verdad que he visto a algunos titulares que he dicho uf, qué susto... Sin embargo, eso no me daba tanto miedo, yo creo que es para cuidarme, y me cuida mucho, y tiene mucha culpa, los adictos tienen mucha culpa, es uno de los temas que trabaja más en los centros de adicción. A mí también me ha ido muy bien, he entendido muchas cosas, se sabe muy poco de la adicción, yo siento que estos últimos años que lo he tenido tan cerca lo he hablado mucho" La actriz se pone a llorar y toca la fibra de cualquier persona que esté mirando la entrevista, y más después de escuchar esta respuesta.
La adición de su padre ha sido uno de los momentos más complicados de su vida, pero que ha acabado con una admiración inmensa de hija a padre, un camino que no ha sido nada fácil y lo recuerda así: "Lo he acabado admirando más, pero he estado muy enfadada, y también he estado un poco sola, ser hija única en estos momentos... Querrías mucho tener una hermana, o un hermano, y yo he querido tener unos hermanos, en los últimos años de mi vida, también era una cosa muy delicada para mi madre, mis padres se separaron, todo eso ha pasado después, no fue fácil lidiar con una separación, con todos los dolores que tiene cada uno, uno tiene que aprender a poner distancia entre lo que le pasaba a él y lo que me pasaba a mí"
Greta Fernández ha heredado el talento por su padre, y una sensibilidad inigualable a la hora de hablar de sus luces y las sombras. Fantástica.