Núria Martínez es una joven catalana de 29 años, farmacéutica, influencer, modelo, bailarina y ex de Omar Montes. Y participó en la última edición de Gran Hermano VIP.
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Pasó por el programa sin pena ni gloria. De hecho, con más pena que otra cosa. La que le provocó un melocotón. A los pocos días de entrar en Guadalix, tuvo que abandonar la casa por motivos médicos, por culpa de una alergia que le provocó esta fruta: "me dio una reacción alérgica que la gente no vio porque estaba muy hinchada y no lo sacaron". A quien sacaron fue a ella, que días después, charlaba con Jorge Javier en el plató de GH VIP. Charlaba y enseñaba un pezón por descuido: "Mi badalonesa, eres más guapa al natural, ponte aquí que hay mejor luz. Se te ve un pezón, solo el derecho".
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Lo que no había enseñado hasta ahora fue la cara que le quedó hecha un poema, un verdadero cuadro, a causa del melocotón. "Algún día os enseñaré la foto de mi cara y lo entenderéis todo", decía antes. Y ahora ha aportado la prueba gráfica de aquel estropicio. Ahora bien, tampoco hacía falta el ademán melodramático que ha adoptado la afectada: "Nunca me había dado por enseñaros algo tan triste porque para mí es algo fuerte de mi vida. He estado muchísimo tiempo de médico en médico, de psicólogos. Llegué a un punto que ya no podía respirar, poca broma".
Una imagen impactante, a pesar del dramatismo de la guarnición escrita, con un mensaje de agradecimiento a los que le han dado apoyo desde el affaire con la fruta y un recadito a los haters: "Les mando un beso y que mientras hablen, quiere decir que estoy viva. ¡Qué vida solo hay una y hay que aprovecharla al máximo!". Tiene razón, hay que sacarle todo el jugo posible a la vida. Pero que no sea de melocotón.