Pocos conocen el pasado de Mishel Gerzig, la espectacular esposa de Thibaut Courtois. Detrás de su imagen de modelo internacional y de sus elegantes apariciones en Madrid, hay una historia marcada por la disciplina militar, el patriotismo y el sacrificio personal. Antes de convertirse en una figura del mundo de la moda, Mishel fue soldado de la Marina del ejército de Israel.
Nació el 5 de junio de 1997 en Tel Aviv, en una familia de origen ruso muy unida. Desde niña destacó por su belleza y su carácter firme. Creció en Eilat, en la costa sur del país, donde desarrolló su pasión por el mar, la naturaleza y los animales. Pero también aprendió pronto el valor del compromiso social, una enseñanza profundamente arraigada en la educación israelí.

Mishel Gerzig, la mujer de Thibaut Courtois, realizó el servicio militar obligatorio en la Marina
A los 15 años, Mishel ya participaba en programas de voluntariado, una práctica obligatoria en la mayoría de institutos del país. Formó parte de un plan de entrenamiento con los bomberos, con más de 40 horas de instrucción. Allí aprendió a manejar mangueras, controlar incendios y actuar bajo presión. Esa experiencia fue su primer contacto con la vida de servicio y marcó su carácter decidido.
En 2015, tras terminar el colegio, llegó el gran paso: su ingreso en el servicio militar obligatorio. Eligió la Marina israelí, una de las ramas más exigentes del ejército. La formación se llevó a cabo en Haifa, una ciudad portuaria al norte del país. Durante meses, Mishel vivió un riguroso entrenamiento físico y mental, adaptado a las duras condiciones del mar. Se especializó como remolcadora marinera, un puesto de gran responsabilidad dentro de la flota.
La foto de un perro fue el inicio de todo
No fue casual su elección. Desde pequeña, Mishel se sentía fascinada por el agua. De hecho, ya tenía la licencia de motos acuáticas antes de alistarse. Su paso por la Marina la marcó profundamente. En entrevistas ha reconocido que aquella etapa le enseñó valores de superación, liderazgo y autocontrol. “Aprendí a no rendirme nunca”, ha dicho en más de una ocasión.
Cuando terminó su servicio, decidió abrir una nueva etapa. Empezó a viajar por el mundo. Visitó Italia, Grecia, Estados Unidos, Colombia, Tanzania... y también España, país que más tarde se convertiría en su hogar. Fue precisamente durante una escapada a Barcelona cuando se enamoró del ambiente mediterráneo. Años después, el destino la uniría al portero del Real Madrid.
El amor entre Courtois y Mishel nació en las redes sociales. Un “like” del futbolista en una foto con su perro fue el inicio de todo. Poco a poco, comenzaron a hablar, a verse, y a construir una relación sólida. En 2021 hicieron oficial su historia, se casaro en 2023 y hoy en día viven juntos en Madrid.