Ya son cinco años consecutivos que el Estado español queda entre los últimos cinco puestos en la clasificación de Eurovisión sin embargo, este año, las votaciones han traído cola. El jurado bielorruso se equivocó otorgando sus votos en la final del festival, según la Unión Europea de Radiodifusión (UER), un "error humano" que ha acabado afectando al resultado y la posición de hasta 24 países participantes, de entre los cuales, España, que recibió 6 puntos que no eran sedes.
Sin embargo, estos 6 puntos no sólo no eran para España, sino que no eran de Bielorrusia. El lío empezó cuando los profesionales de la música bielorrusos publicaron su votación después de la primera semifinal de Eurovisión. Eso, totalmente prohibido en el reglamento del concurso, provocó que la UER sustituyera este jurado por una puntuación media construida a partir de los votos de los países con vínculos exsoviéticos.
En vista del revuelo, los organizadores se han visto obligados a corregir al marcador a toda prisa. La candidatura de Miki, con sólo 7 votos de los expertos musicales de Eurovisión, sin el apoyo de Bielorrusia, mantiene un único punto procedente de la Federación Rusa y, aunque no hay cambios sustanciales, Radiotelevisión Española se libra de la última posición de la tabla del jurado, porque Israel, la anfitriona de la edición, se queda con 0 puntos.
A la clasificación general, Chipre y Malta, por un lado, y Eslovenia y Francia, por la otra, son los países más beneficiados y perjudicados respectivamente en este baile de puntos, subiendo y bajando hasta dos peldaños en el marcador. Suecia arranca la quinta plaza a Noruega y Macedonia del Norte escala a el séptimo lugar, su mejor resultado desde que participa a Eurovisión, además de ganar en la votación del jurado ante la aclamada propuesta sueca.
Clasificación de Eurovisión 2019, después de las correcciones de la UER (Manuel Rivero).
Es imposible, sin embargo, tapar el ridículo de España edición tras edición. Con 54 apoyos y una 22ª posición, este año tampoco ha habido suerte en Eurovisión. Ni la canción de charanga ni la metafórica puesta en escena del director artístico Fokas Evangelinos ni la prensa de los últimos días han ayudado en Miki para que hiciera un buen papel. Un desastre más a añadir que ha evidenciado, otra vez, a la estrellada española ante la comunidad internacional.