En verano se da la paradoja de que la reina Letizia se niega a hacerse fotos en una piscina, una playa o con ropa de bando, para evitar comentarios como los que sufrió su hija mayor en las playas de Uruguay, pero en cambio se viste con camisetas sin mangas que dejan a la vista unos brazos como de concurso de hacer polos, de brazos musculosos de estibador. Se ha escrito mucho sobre su obsesión para mostrar la musculatura que trabaja en horas de fitness, escalada, pesas y gym. Se hizo construir un rocódromo en Zarzuela para practicar la escalada. Tiene mucho tiempo libre. Añade un toque de bronceado no se sabe si solar, de rayo UVA o de tarro, falso maquillaje del brazo. El caso es que ha vuelto a mostrar músculo pero no en la playa sino en una recepción oficial eclipsando todo el acto con los brazos morenos.

Letizia se vistió así para recibir la selección femenina de fútbol que se marcha a jugar la Eurocopa. Siempre que recibe mujeres deportistas de élite hace lo mismo, querer lucir más en forma que ellas, antes muerta que eclipsada por otra mujer. Letizia es vigoréxica, obsesionada para estar en forma, esbelta, delgada, comida sana, y musculosa, como una Mari Pau Huguet royal. A cada acto oficial luce un músculo nuevo, una imagen que hace poco de reina. El día que recibió los equipos estatales de waterpolo, deporte que trabaja el tren superior, los brazos para tirar la pelota dentro del agua. Letizia pacta con el estilista un vestido sin mangas. Siempre hace igual:



Ahora un entrenador personal escribe a Lecturas que es sorprendente como estando tan delgada puede tener este brazo, imposible de imaginar en Kate Middleton o en Máxima de Holanda. Letizia se cree Pilar Rubio. Dice el personal trainer que "Nuestra reina no siempre ha tenido unos brazos tonificados y definidos como ahora. Es cierto que siempre ha sido delgada, pero ahora gracias a su entrenamiento y alimentación exhibe brazacos". De constitución magra y delgada, hace abdominales, yoga y pilates. Mucho deporte: "Entrenador personal que acude a Zarzuela casi a diario, gimnasio particular distinto de los empleados, pesas y ejercicios de cardio para tonificar,, running, yoga Iyengar". Mucho cirujano plástico y muy poco trabajo de oficina. Letizia es imagen y la imagen a veces es pasar más desapercibida. Es la consorte, no la reinante. Menos es más, excepto en Letizia a quién le parece que más es poco.


Letizia en Benidorm, Casa real
Los estándares de las casas reales europeas son finura y elegancia. Letizia marca bíceps y España alucina. Está mucho más fuerte que Felipe, Por eso ella camina 4 pasos por detrás, para no dejarlo en evidencia, con los bracitos pequeños de Felipe VI. En un pulso entre los reyes, Letizia le destroza la muñeca al marido. Brazacos de halterofilia. Letizia no es reina, es una latin queen.