Joaquín Sabina ha centrado la cabeza con ‘La Jime’, con quien mantiene una relación desde 1999, pero asegura que “no he sido ni un padre, ni un marido, ni un amante ejemplar”. De esta forma tan honesta resume su vida sentimental. Hace treinta años que está muy enamorado. Comparte su vida con Jimena Colorado. Se conocieron en Lima en 1994, aunque no se casaron hasta el 29 de junio de 2020 en el registro civil de la calle Pradillo de Madrid. La boda fue oficiada por el ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska y entre los invitados se encontraban Joan Manuel Serrat y su esposa, Candela Tiffón, los escritores Luis García Montero y Almudena Grandes, el cineasta Fernando León de Aranoa, y los periodistas Jesús Maraña y Mónica Carrillo.
Es cierto que él siempre ha huido del compromiso con todas las mujeres que han formado parte de su vida, pero en esta ocasión ya tenía una edad y quería hacer las cosas bien, era hora de centrar la cabeza de una vez por todas, bastante mal había actuado en el amor. “En todas mis idas y venidas a los hospitales, incluida la última, siempre he pensado que si me pasa algo, quiero que tenga papeles que le den todo tipo de derechos". Y añadía una frase que define su visión del amor. "Lo mejor es verte en los ojos de la otra persona, porque no te ves tal como eres, sino mejorado”.
Sin embargo, no ha sido la única relación de Joaquín Sabina, aunque es la más longeva hasta la fecha. Con Isabel Oliart, la hija del ministro de la UCD, Alberto Oliart, tuvo a sus dos hijas, que también acudieron a la boda del cantante con ‘La Jime’. Nunca se plantearon casarse aunque tuvieron dos hijas.
La primera mujer que se conoció del artista fue su paisana Virtudes Cantero, apodada como “Chispa”. Le dedicó "Una de romanos". Una relación imposible, porque el padre de ella, notario de Úbeda, quiso impedirlo. La envió a Granollers, a un colegio, él la siguió, y terminaron fugándose durante una breve temporada.
Joaquín Sabina tuvo una amante con la que engañó a la madre de sus hijas
Con quien se casó por primera vez fue con Lucía Correa, sucedió en 1977, cuando él cumplía el servicio militar en Palma de Mallorca. Intentó obtener el pase pernocta para dormir fuera del cuartel y compartir más tiempo con ella.
Estas son las cuatro mujeres que han llenado su corazón de vida. Se podría hablar de una quinta mujer, la persona con la que Joaquín Sabina engañaba a la madre de sus hijas, Cristina Zubillaga. Una modelo mallorquina que conquistó Madrid en los años noventa. Ella misma relató en el programa Pongamos que hablo de Sabina, presentado por Iñaki López en laSexta, cómo se conocieron. “Yo era un poco loquita de noche y una de esas veces, sola en un rincón de Amnesia, se me acercó y me invitó a una copa. Así empezó todo", explicó. Es a quien le dedicó la canción 19 días y 500 noches. Isabel siempre supo que el cantante la engañaba con otra.
