Cristina Pedroche ya ha salido de cuentas. Sí, la principal estrella de las campanadas está a punto de dar a luz a su segundo hijo que, aunque no ha querido revelar su nombre, sabemos que será un niño. El pequeño llega en un año complicado para la colaboradora televisiva porque ha pasado situaciones surrealistas con Dabiz Muñoz. Empezando por el anuncio del embarazo, que fue justo en el día en que se hacen más bromas del año, y acabando en la más que sonada crisis de la pareja. El panorama, a media primavera, parecía más bien complicado, porque en los días clave para pasar tranquila con la pareja, Pedroche se había mudado a casa de sus padres sin alertar a sus seguidores.


A base de silencios, bromas irónicas y mensajes enigmáticos, la pareja fue haciendo más grande la bola que hablaba sobre una ruptura y, de hecho, los únicos que salieron a desmentir alguna cosa fueron los miembros de su entorno, que hablaban de una mudanza. Después de un tiempo de noticias y gestos que hablaban más que cualquier declaración, la pareja recondujo el camino y lo hizo muy lejos, en Dubái, en uno de los restaurantes de Dabiz Muñoz en que, prácticamente, Cristina rompió este silencio tan impropio en su perfil de Instagram. Ahora, con la relación arreglada y consolidadísima, Pedroche y Muñoz han hecho bromas sobre la situación que pasaron y la protagonista tiene a los seguidores a la última hora sobre el estado de su barriga. En un tiempo de espera que se acostumbra a hacer largo, Cristina Pedroche está ilusionadísima y ha querido hacer un preguntas y respuestas con los seguidores para responder a todas las dudas antes de que salga el pequeño.

Sí, la protagonista, como siempre, ha respondido a todo sin pelos en la lengua y una pregunta ha generado un debate espectacular en su perfil: "¿Le pusiste pendientes a Laia?". La estrella televisiva lo tiene claro: "Por supuesto que no. No concibo hacer pasar un mal rato a un bebé por una cuestión estética. Y me da igual que me digan que ya los hacen con mucho cariño, que casi nunca se infectan... No pienso correr el riesgo por el mero hecho de que sea una niña. Porque si es un niño no se hace, ¿no? ¿Qué nos quieren decir con esto, que no somos suficientemente bonitas y nos tienen que poner dos pendientes? Yo no lo veo. Cuando sea mayor ya lo hablaremos, no soy yo nadie para negar que me encantan los pendientes pero no en bebés".

Para sorpresa de Pedroche, el texto ha tenido un arsenal de respuestas dándole apoyo y otras en contra. Aquí algunos ejemplos: "Brava, y lo siento por la que te va a caer con esto ahora", "Cuantas tonterias dices.... ofuuuu", "Eres retrasada mental"... La protagonista ha compartido, alucinada, una recopilación de respuestas: "No sabía yo que se fuera a abrir este debate. Y sí, en mi cuenta personal doy mi opinión y cuento mi historia (creo que es algo lógico). Cada una que haga lo que quiera, faltaría más. En fin... Buenas noches". Cristina Pedroche, fantástica, sin pendientes en las orejas, ni pelos en la lengua.