Y el séptimo día descansó. Dios y TV3 (que no son la misma cosa) descansan los domingos. Parece como si la pública le tuviera temor reverencial a Jordi Évole, que nació de follonero en sus platós. Évole se ha hecho mayor en La Sexta, muy mayor. Su programa especial por los 10 años de Salvados lideró en Cataluña con un espectacular 17,3% y TV3, que sabía que Évole celebraría la efeméride, programó un 30 minuts sobre la minoría rohinyá en Birmania que parecía más propio del canal 33. Cayó a un flojo 8%, arrastrando De bon humor a un ínfimo 6,9%. TV3 fue última del prime time. 30 minuts quedó, incluso, por detrás de Paz Padilla (Planeta Calleja, 8,7%).
Cuatro
En España, la presentadora de Sálvame bailando en África hizo más audiencia que Évole. No debió gustar que el de Cornellà diera la voz al pueblo y se dijeran en prime time verdades como "Le daría 300 euros a Rajoy a ver cómo pasa el mes". Dirán que es populismo pero les salió un programa como la vida. Por 10 años más. Después Ana Pastor se encargó de devolver la voz al establishment y Albert Rivera siguió proclamando que el independentismo siente "odio" al diferente. Lo dice él que destacó por la muerte de Forges una viñeta contra el procés. El objetivo era que Rivera quedara bien y la audiencia se hundió: del 17% de Évole al 9% de Pastor. Coincidió con El divan a Suso de Toro que subió a un buen 7,4%. Cóppulo, sin los aspavientos de Pastor, casi hace más que ella. De Toro soltó en prime time frases nunca dichas como "los medios de comunicación españoles han hecho un lavado de cerebro a la población española". Y él de lavar sabe, después de narrar el chapapote del Prestige.
TV3
Que TV3 tiene un problema lo demuestra que Enganxats no enganche. Espartac Peran se queda en un 4,9% que le augura poco futuro a la tertulia de las dos series de la casa. Sería una sección correcta dentro de la mesa de TV del Tot es mou, pero los domingos no funciona y los tertulianos actores no son los más desenvueltos para comentar con distancia el trabajo de sus compañeros. El título es una jugarreta. Enganchado quién a qué. El momento de Espartac Peran comentando el programa de Cárdenas de La 1 cuando lo visitaron los actores de Verano azul casi hace explotar los aparatos de TV.
TV3
Espartac hace menos que Toñi Moreno con Viva la vida (8,9%) en la tarde de Telecinco. Claro que los domingos a TV3 no le funciona ni el APM, perdido antes del TN de mediodía (9,1%). La diferencia entre un domingo líder o no para TV3 es cuando 30 minuts se arremanga y hace programas de producción propia o los compra a TV extranjeras. En septiembre parece que no habrá presupuesto para comprar nada y volverá la época dorada del 30 minuts. Cuando Pujol vetaba los documentales sobre vertederos o cuando un redactor pasaba semanas en Tor investigando los crímenes del Pirineo. Mientras tanto, Évole les roba la merienda.