Uno de los cómicos más populares de los años 90 fue Ángel Garó. Su aparición en el show más visto de la TV, el concurso Un,dos,tres de la época de Jordi Estadella ("Yo nunca concocí a Mayra Gómez Kemp"), lo envió directo al estrellato. Hacía personajes surrealistas como Juan de la Cosa, con humor muy diferente de los de Bigote Arrocet, Arévalo, Beatriz Carvajal o La Bombi. Más moderno. Los otros hacían de gangoso, de homosexual con pluma, de tartamuda o de prostituta. Eran otros tiempos. Garó lo modernizó, impecable de negro. Ahora ha vuelto al programa blanco Y ahora Sonsoles para revelar que triunfó pero con envidias entre compañeros: "Yo era muy guapo, por primera vez un humorista guapo, yo no sabía que era tan guapo, era modelo". Acabó enamorándose por primera vez de otro hombre, catalán, el cantante rubio de Locomía Juan Antonio Fuentes Ferret, nacido en Barcelona de padre andaluz y madre catalana.
Ángel Garó tenía vocación artística y lo vio Chicho Ibáñez Serrador pero no quería abrirse públicamente. No habló abiertamente de que era homosexual hasta mucho después de acabarUn, dos, tres. "Mi primer amor hombre fue Juan Antonio, el rubio de Locomía, que dejó su trabajo por mí. Él vivía en una urna porque así lo quería el representante de Locomía, José Luis Gil. Fue mi cariño durante 3 años. No se quería ir a Estados Unidos, quería vivir con su pareja: yo. Fue muy cariñoso, nos conocimos en el Joy Slava, la discoteca de Madrid cuando yo no era famoso. Éramos muy jóvenes, se fue a México con la última tourné de Locomía pero cuando volvió entonces yo era la persona más famosa del país. cuando volvió la juventud, yo tenía 27 años y él era más joven. Gracias a él tengo una ahijada".Tres años de amor entre Garó y uno de los catalanes de Locomía, el rubio. Ahora es así:
Según su Linkedin, Juan ahora es responsable de degustación en Semon, la tienda de comida de lujo del barrio de Galvany al lado del Turó Park en la plaza de la iglesia redonda, Sant Gregori Taumaturg. Si van allí pueden cantar, Looooocoooomía. Es uno de los restaurantes favoritos de Hansi Flick. Era una tienda de comestibles de lujo que ha desembocado en un local más abierto a la misma plaza. Uno de los descendientes de la fundadora revelaba al diario ABC que los camareros hablan muy bien de Hansi Flick como cliente: "Flick por no entrar en debates estériles hace ver que habla un inglés peor del que en realidad habla -es mucho más fluido cuando saluda en los restaurantes, donde es por cierto muy querido, porque nunca un entrenador del Barça había dejado tantas propinas como él". Propinas a Juan de Locomía, ex de Ángel Garó. Quién se lo iba a decir a Flick, unirlo a Juan de la Cosa. Uh.