Los que trabajan con Ana Rosa Quintana tendrían que vigilarla de cerca: la presentadora de Telecinco corre el serio riesgo de quedarse deshidratada. No es que haya corrido ninguna maratón. Simplemente, se está quedando sin saliva después de los trajes de saliva que hace desde su programa a la derecha y la monarquía españolas.

ana rocía plato

'El programa de Ana Rosa' (Telecinco)

La reina de los matinales, no contenta con hacer abyectos masajes televisivos sin ningún rubor cuando tiene sentados en frente a Pablo Casado o Santiago Abascal, ahora ha dedicado esfuerzos y la poca vergüenza que le quedaba para hacer una petición pública que afecta al rey, y de rebote, que ha sulfurado al resto de ciudadanos de a pie que han visto cómo la periodista se pasa por el forro cualquier indicio de decencia. AR no le ha tenido que gritar V.E.R.D.E. para demostrar que a ella, a borbónica, no hay quien la gane.

felip ríe primer plano GTRES

Felipe (GTRES)

En pleno programa, Quintana ha hecho una proclama monárquica que ha provocado vergüenza ajena e indignación a partes iguales. En plena polémica por los muchos políticos y militares que han hecho uso y abuso de su poder institucional por vacunarse antes de tiempo, en plena miseria moral por parte de algunos en plena pandemia por el coronavirus, Ana Rosa Quintana ha tenido la genial idea de preguntar abiertamente: "¿No os parece que hay diversos cargos que deberían ser vacunados antes que el resto de la población? Se debería vacunar al Rey". En la mesa, y en su casa, los colaboradores y espectadores no dan crédito, teniendo en cuenta que ni los políticos ni Felipe forman parte de ningún grupo de riesgo por saltarse a la torera la orden de preferencia. Pero a pelota de la monarquía no hay quien la gane y ella, dispuesta a cambiar lo que haga falta para contentar al monarca: "Igual el protocolo está mal y hay que cambiarlo. No digo que se vacune a todos los políticos, pero sí al Rey, al presidente, y a un grupo de cinco o diez más".

ana rocía lunes 25 2

Ana Rosa Quintana (Telecinco)

Los que no han sido cinco o diez más, sino una avalancha masiva, han sido los que han destrozado a la presentadora por no tener un mínimo de decencia, poniendo de manifiesto su vasallaje por encima de todo:

Como dice algún tuitero, para lo de Ana Rosa no hay vacuna.